Carlos Navarrete Romero/ Chilpancingo, Gro.
La alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, aseguró que dentro de Morena hay actores políticos «desesperados» por el proceso electoral y que buscan afectarla para dejarla fuera de la contienda.
Este lunes Román Ocampo acudió a la inauguración de la Casa del Comisario, en la colonia Real del Valle, en Chilpancingo, obra para la cuál hizo una aportación junto al alcalde de la capital, Antonio Gaspar Beltrán.
Durante su intervención en el evento, la presidenta de Acapulco refirió que Guerrero debe estar por encima de cualquier diferencia, proyecto personal o de un grupo político.
«Aquellos que usan las necesidades del pueblo para manipularlo y utilizarlo en sus proyectos políticos, generando división y ataques a sus adversarios, le causan un gran mal a nuestro pueblo, pues no solo no resuelven sus necesidades, sino que además se gastan los recursos públicos en proyectos de grupos políticos cuando deberían servir para que nuestros campesinos tengan una mejor calidad de vida», expresó.
Posteriormente en entrevista, reiteró lo que dijo ayer en Acapulco, respecto a que existe una campaña en su contra orquestada desde Morena y que derivó en las protestas ocurridas durante la visita del presidente, Andrés Manuel López Obrador, el viernes pasado.
Sin embargo, indicó que por el momento no está en sus planes acercarse a esos actores para dialogar y pedirles detener esa campaña, o solicitar la intervención del partido.
«Hay compañeros desesperados al interior de Morena, como hay gente muy desesperada de otros partidos, los tenemos identificados, pero yo creo que en este momento lo que más importa es el trabajo que estamos haciendo por Acapulco».
También se negó a mencionar los nombres de las personas que promueven esos ataques y dijo que no se va a «desgastar» interponiendo quejas o denuncias en su contra.
«Está la guerra sucia interna y de los de enfrente, pero no me interesa por el momento, lo que me interesa en este momento es servir a Acapulco».
De los prestadores de servicios turísticos que protestaron el viernes durante la visita de López Obrador, por haber sido desalojados de la zona de playa, la alcaldesa indicó que el desalojo se llevó a cabo porque éstos no contaban con los permisos necesarios para colocarse en la bahía.
Incluso mencionó que los inconformes fueron notificados previamente sobre el desalojo, por lo que negó que su gobierno haya actuado de manera arbitraria.