Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
El abogado del obispo emérito Salvador Rangel Mendoza, Luis Alberto Gasca Cisneros, acusó al Gobierno de Morelos de usar “las armas del Estado” para retener videos relacionados con la presunta privación de libertad del clérigo.
Luis Alberto Gasca fue abordado anoche luego de que Salvador Rangel saliera de manera voluntaria de un hospital privado de Cuernavaca para ser trasladado a su casa.
En sus declaraciones, el nuevo abogado del obispo emérito reclamó que el Comisionado de Seguridad Pública de Morelos, José Antonio Ortiz Guarneros, informara que Salvador Rangel no fue víctima de un secuestro exprés sino que estuvo en un motel con otro hombre, de manera voluntaria.
“Él (José Antonio Ortiz) tiene labores de prevención no tiene labores de investigación, pero obviamente tiene también las armas del Estado para poder retener videos de diferentes cámaras de seguridad que existen del C-5, de todo el estado de Morelos, para poder tener los elementos necesarios”, dijo.
“Yo el llamado que les haría (a las autoridades estatales de Morelos) sería que hasta que no tengan las evidencias necesarias hagan una participación y hagan una manifestación, porque es muy fácil hablar de las personas sin tener elementos de prueba”, añadió.
Luis Alberto Gasca reveló “lo que a mí me manifestó el Monseñor es que él salió de su domicilio, se detuvo en un Oxxo a comprar algo y de ahí, él perdió el conocimiento, no recuerda si lo golpearon, si le dieron algo a oler, no me mencionó nada de eso”.
No obstante, el abogado afirmó que le observó al obispo emérito golpes en el cuerpo y marcas en las muñecas, “como si hubiera tenido forcejeos”.
Detalló que Salvador Rangel desconoce las versiones oficiales que tanto el Gobierno como la Fiscalía de Morelos han hecho públicas sobre su desaparición, las cuales no concuerdan; “no se le ha comentado nada porque por su estado de salud es delicado hacerle comentarios ahorita, él, en su momento, cuando esté restablecido de salud pues obviamente se va a enterar”.
Finalmente, dijo que cuando el obispo emérito haya recuperado su salud “se tomarán las determinaciones que sean pertinentes”.