Alberto Gómez/Chilpancingo
Alrededor de 40 personas, principalmente adultos mayores, participaron este sábado en una movilización en Chilpancingo como parte de la convocatoria nacional de la llamada Generación Z, cuyo objetivo fue exigir mayor seguridad y poner fin a la violencia en el país.
La protesta inició a mediodía en el monumento a Las Banderas y avanzó hacia el Zócalo capitalino. Los asistentes acudieron vestidos de blanco y portaron pancartas con mensajes de inconformidad por la situación de inseguridad que vive México.
Durante la marcha, Antonio Velázquez señaló que la movilización buscó manifestar el rechazo a lo que calificó como un régimen antidemocrático y permisivo con la violencia. “Particularmente en Guerrero, ya basta”, expresó.
También cuestionó lo que consideró una imposición en el Poder Judicial y el deterioro de la economía nacional.
Velázquez reconoció que existe temor entre la población al protestar, pero afirmó que es necesario levantar la voz ante un gobierno que “prometió un cambio” y no lo cumplió.
Entre las principales demandas, los asistentes pidieron justicia por el exalcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, y por Carlos Manzo Rodríguez, de Uruapan, Michoacán, a quienes recordaron como figuras políticas comprometidas con transformar la forma de gobernar.
Aunque en Chilpancingo habían sido convocadas tres movilizaciones, dos de ellas se cancelaron. La primera, prevista a las 9:00 horas en el parque Margarita Maza de Juárez, terminó únicamente en un mitin con 17 personas en el monumento a Luis Donaldo Colosio.
La segunda, programada a las 11:00 en la Alameda Granados Maldonado, también se suspendió, y sus convocantes se sumaron a la tercera marcha del mediodía que finalmente recorrió las calles hasta el centro de la ciudad.