Ángel Galeana/Chilpancingo
La gobernadora Evelyn Salgado Pineda entregó en comodato la administración de la mansión conocida como «El Partenón» en Zihuatanejo, que fue propiedad de Arturo Durazo Moreno, popularmente conocido como «el negro durazo», la cual se convertirá en un espacio cultural.
La gobernadora Salgado Pineda y el alcalde Jorge Sánchez Allec firmaron el contrato este viernes en Zihuatanejo, y se comprometieron a invertir 12 millones de pesos en la polémica mansión para que sea un espacio público de cultura.
Salgado Pienda recordó que entre los planes que tenía para la propiedad era venderla o cambiarla, pero el alcalde Sánchez Allec le propuso convertirla en una casa de cultura para cambiar su imagen que, dijo, es sinónimo de ostentosidad y corrupción. Aceptó la propuesta y este viernes entregó al ayuntamiento de Zihuatanejo la administración de la casa.
«El Partenón es un recuerdo a donde no se debe volver, el dinero no debe invertirse en estas cosas», señaló la Gobernadora.
Indicó que el inmueble será visitado por turistas y se convertirá en una casa de cultura en la que se harán proyecciones de distinta índole o tardes de música, entre las actividades que se podrán programar.
De acuerdo con diversos textos, El Partenón es una propiedad de alrededor de 20 mil metros cuadrados que tuvo un costo de 700 millones de pesos. Se le conoce así por su similitud con el templo griego de Atenas.
Su construcción fue ordenada por Arturo Durazo, mientras fue jefe del Departamento de Policía y Tránsito del Distrito Federal entre 1976 y1982, durante el sexenio de su amigo, José López Portillo, quien lo hizo General del Ejército por decreto.
Según los registros sobre El Partenón, fueron varios policías del Distrito Federal al mando de Durazo quienes fueron habilitados como albañiles para ayudar en la construcción y posteriormente como empleados de mantenimiento y servicio.
La propiedad fue confiscada a Durazo cuando fue detenido en 1984, y la familia inició tiempo después un litigio para recuperar la mansión. En 2019, la Suprema Corte de Justicia de la Nación otorgó la propiedad al Estado de Guerrero, y este viernes la gobernadora cedió los derechos en comodato al gobierno de Zihuatanejo.
Arturo Durazo fue involucrado en diversos delitos, desde asesinatos hasta fraude y contrabando, todo desde el el amparo del Departamento de Policía del Distrito Federal y del presidente López Portillo.