Ángel Galeana/Chilpancingo
Con 11 votos en contra de los diputados del PRI, PAN, PRD y MC, el Congreso local avaló con 32 votos de Morena, PT y PVEM la reforma constitucional en materia de simplificación orgánica, con la que se desaparecen 7 órganos autónomos que serán integrados a las secretarías de estado bajo el argumento de generar ahorros económicos al erario público y agilizar los trámites de cada organismo.
La aprobación en el Congreso local se realizó en Fast Track. La minuta del Congreso de la Unión fue turnada ayer al Congreso local y a su vez a la Comisión de Estudios Constitucionales y Jurídicos que esta mañana presentó el dictamen para ser votado.
Guerrero se convirtió el estado 7 en avalar la minuta de reforma enviada por el Congreso de la Unión. Antes fueron los Congresos de Tabasco, Sonora, Oaxaca, Ciudad de México y Zacatecas.
Para la realización de esta sesión, se reprogramó para más tarde la comparecencia del secretario de Planeación y Desarrollo Regional que estaba establecida para las 10 de la mañana. Además, para agilizar la sesión, la Junta de Coordinación Política acordó que las participaciones de los diputados se redujeran de 10 a solo 5 minutos para fijar su postura con respecto a la reforma.
Con la reforma se desaparecen 7 órganos, 3 de ellos constitucionales que son: La Comisión Federal de Competencia Económica (COFESE), el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI). 2 más que son órganos descentralizados que son: el Consejo Nacional de Evaluación de Política de Desarrollo Social (Coneval y la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educción (Mejoredu) y otros 2 que son órganos reguladores coordinados en materia energética que son la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
La diputada Citlali Calixto Jiménez, de Morena, quien preside la Comisión que realizó el dictamen, defendió que se la reforma se realiza en una etapa de reestructuración nacional que tiene como objetivo hacer más eficiente la administración pública. Justificó que el espíritu de la reforma no es anular las materias como transparencia gubernamental acceso a la información pública, regulación económica y evaluación de programas sociales, sino de aprovechar la especialización que tiene el personal de los órganos que desaparecen y sumarlas a las dependencias que tienen las mismas atribuciones.
Los partidos de oposición votaron en contra. La diputada del PAN, Irene Montiel Servín acusó que desde el gobierno federal “destrozaron” la división de poderes y la independencia del Poder Judicial, y con la reforma de simplificación orgánica lo que pretende el gobierno es “extinguir los órganos autónomos porque les estorban los contrapesos”.
La diputada del PRI, Pilar Vadillo Ruiz señaló que con la reforma el gobierno federal busca centralizar el poder. Señaló que la extinción de los 7 órganos lleva a la opacidad y la corrupción, favorece las prácticas monopólicas, incrementa los precios y concentra el poder en la presidenta del país.
“Estaríamos retrocediendo en el acceso a la información y evitando o dificultando conocer actos de corrupción como la Estafa Maestra, la Casa Blanca o Segalmex. Con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), al ser el encargado de medir y evaluar los niveles de pobreza en México, así como la efectividad de los programas sociales. Con su desaparición, los datos sobre la pobreza se conocerán cada 10 años, afectando el diseño de políticas sociales eficientes”, señaló
Por el PRD, el diputado Iván Ortega Jiménez apuntó que con la reforma se eliminan los contrapesos del país. Argumentó que el Congreso de la Unión, al realizar la reforma, no justificó con datos duros cuáles son los beneficios sociales y cuál es la afectación directa al erario público que avalen la desaparición de los órganos autónomos.
La diputada Erika Luhrs Cortés, de Movimiento Ciudadano criticó que los órganos autónomos fueron impulsados por la oposición que ahora es mayoría en el gobierno. “La iniciativa es un retroceso para la transparencia que afectará a cientos de mexicanos, si alguien construyó los organismos son quienes eran oposición y ahora son mayoría”.
A los partidos de oposición se impuso la “alianza legislativa” de Morena, PT y PVEM, quienes avalaron la reforma con su mayoría en el Congreso. El diputado de Morena, Pablo Sandoval Ballesteros argumentó que los órganos autónomos surgieron en el sexenio del ex presidente Carlos Salinas de Gortari, cuando, consideró, no había legitimidad de las autoridades y una violación sistemática de la Ley.
Defendió que el derecho plasmado en los órganos no desaparece, lo que se elimina, acusó, son excesos de gasto como las cuentas de sus titulares pagadas con “American Expres” en table dance y sueldos exorbitantes. Sostuvo que la reforma está avalada por la ciudadanía que votó por Morena y no fue un acuerdo como el Pacto por México, establecido por dirigencias partidistas.
De Partido Verde, la diputada Obdulia Naranjo indicó que el gobierno federal busca la transparencia alineada al principio de austeridad republicana. Se manifestó a que se elimine la duplicidad de tareas y que las funciones de los órganos autónomos sean absorbidas por las secretarías del Poder Ejecutivo. Argumentó que la reforma genera ahorros de 32 mil millones de pesos que serán destinados a programas sociales.
Por el PT, la ex morenista, Claudia Sierra Pérez, defendió que es urgente la eficiencia administrativa y la agilidad de toma de decisiones que son fundamentales para el desarrollo social y económico del país.
“La reducción de burocracia y la eliminación de duplicidad destinarán más recursos a necesidades de la población. No pone fin a la transparencia ni centralizará el poder si no que fortalece al Estado en contra posición a políticas neoliberales que debilitaron al país”, señaló.