Alberto Gómez/Chilpancingo
El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, confirmó que desde el año pasado se rompió la tregua entre grupos criminales en la capital, lo que ha derivado en nuevos episodios de violencia como la quema de cuatro unidades del transporte público y el asesinato de dos comerciantes la semana pasada.
En entrevista tras la misa en honor a San Francisco de Asís, el jerarca católico hizo un llamado a los líderes criminales a retomar el pacto de no agresión para poner fin a la violencia, o al menos disminuirla.
“Es nuestra misión buscar la paz, porque Cristo es nuestra paz y todos somos hermanos. Tenemos que acercarnos a quienes tienen en su corazón guerra, odio u otra cosa, para que sea Cristo quien habite dentro”, expresó.
Cuestionado sobre la posibilidad de que la iglesia vuelva a intervenir como mediadora con los grupos criminales, González Hernández sostuvo que lo harán, al considerar que es parte de su responsabilidad pastoral y social.
A pocos días de que se cumpla el primer aniversario luctuoso del exalcalde Alejandro Arcos Catalán, a quien calificó como “mártir de la paz”, el obispo llamó a los munícipes y funcionarios a trabajar en unidad, escuchar a la ciudadanía y cumplir acuerdos con lealtad.
“Nos duele la muerte de nuestro alcalde, pediremos por él en su aniversario, por su eterno descanso, por su familia y por los munícipes de Chilpancingo. Es muy penoso que alcaldes recién electos hayan terminado de esa manera, y no queremos que vuelva a suceder”, dijo.
Finalmente, adelantó que la iglesia está dispuesta a intervenir como mediadora entre autoridades estatales, municipales y los propios líderes criminales, con el objetivo de alcanzar la paz en Chilpancingo.
La tregua entre los Tlacos y Los Ardillos, los dos grupos delictivos que operan en Chilpancingo y muncipios aledaños, fue anunciada en febrero del año pasado por integrantes de la Iglesia Católica, quienes intervinieron para alcanzar un acuerdo de paz, tras una ola de enfrentamientos y asesinatos.
La tregua fue confirmada el 4 de marzo del 2024 por un grupo armado que publicó un video en Facebook, el cual se identificó como Los Tlacos, en el que advertían que «los señores hicieron una tregua y se respeta».

Días antes, el 27 de febrero, el sacerdote Filiberto Velázquez Florencio, ofició una misa en Tlacotepec, considerada como el bastión de «Los Tlacos», para celebrar la paz alcanzada entre los grupos criminales.