Ángel Galeana
Chilpancingo, Gro. 8-Sep-2019
El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, dijo que posiblemente existan acuerdos entre autoridades e integrantes de grupos de policías comunitarias, quienes operan de manera impune en distintas regiones de la entidad.
Entrevistado en Chilpancingo, el sacerdote que se caracterizó por dialogar con líderes de grupos criminales para alcanzar acuerdos de paz, ejemplificó que al menos dos grupos de comunitarios se han extendido sin que el Gobierno intervenga.
“Se ve que hay ciertos acuerdos a ciertos niveles de Gobierno. Yo les pongo un ejemplo: antier fui al rumbo de Teloloapan y la (policía) tecampanera ya se recorrió dos pueblos para acá, en Xalostoc, y otro pueblo, pero ya están establecidos. Lo mismo los que invadieron los pueblos de la Sierra y ahí están, nadie los mueve, nadie los quita; entonces, suena como que hay ciertos arreglos y ojalá que alguien a nivel federal, alguien pueda poner una solución”, dijo.
El obispo recordó que desde siempre ha denunciado que muchas de las guardias comunitarias sirven al crimen organizado.
Por otro lado, recordó que los grupos delictivos ya no se dedican a la siembra de amapola debido a la caída del precio en el mercado de las drogas, por lo que ahora cometen otros delitos como robos, extorsiones y secuestros, por lo que hizo un llamado al Gobierno federal a que “ponga orden y disciplina, sobre todo con la cacaraqueda Guardia Nacional”.
Respecto a este grupo policiaco, señaló que tiene dos desventajas: que no conocen el terreno en el que se mueven, y que “llegará el día que les lleguen al precio, y es donde veo lo más peligroso, ojalá que se insista en la rectitud y la honestidad”.
El líder católico reiteró que está en desacuerdo que militares se hagan cargo de la seguridad pública, y consideró que ahora no se sabe si la Guardia Nacional es militar o civil, pero hizo un llamado a la ciudadanía a no renunciar al derecho que tiene de ser protegida por fuerzas civiles.