Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
Desde febrero a la fecha, más de 14 mil habitantes de la región Montaña, principalmente de los pueblos originarios Me’phaa, Nasavi y Náhuatl, han migrado a distintos estados ubicados en el norte del país, donde trabajan como jornaleros en campos agrícolas.
En conferencia de prensa transmitida de manera virtual desde la cabecera municipal de Tlapa de Comonfort, el director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, informó que este mes comienza la temporada alta de migración en medio de la pandemia del COVID-19, con las medidas sanitarias correspondientes para evitar contagios.
Barrera Hernández precisó que los migrantes son principalmente de los municipios de Tlapa de Comonfort, Cochoapa El Grande, Metlatónoc y Copanatoyac; además de que entre ellos se cuentan familias completas, desde recién nacidos hasta adultos.
Este miércoles, un autobús partirá desde la ciudad de Tlapa con destino a Sinaloa, que fueron contratados por la empresa Agrícola Buen Año como jornaleros. Una representante del corporativo indicó que los migrantes son originarios de Cochoapa El Grande e Iliatenco, la mayoría son jóvenes, quienes fueron reclutados por personal de la empresa.
Los jornaleros reciben un contrato de seis meses y un salario de 260 pesos al día, los cuales les entregan en pagos semanales; además cuentan con prestaciones y guarderías para sus hijos.
De acuerdo con la representante, también se gestionan programas de estudio para los menores de edad, según el año escolar que les corresponden cursar y para ello deben presentar sus antecedentes educativos.
Barrera Hernández llamó a las autoridades municipales y estatales para que brinden atención médica, así como apoyos para las familias migrantes, debido a que la Casa de Jornaleros ubicada en la ciudad de Tlapa todavía no está terminada.
Por último, informó que Tlachinollan está impulsando una propuesta, junto con Fundar y la Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas, para que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos de la Secretaría del Trabajo apruebe un pago mínimo de 300 pesos para los jornaleros, de manera que se reconozca y sea oficial en el país.
Según las cifras registradas por Tlachinollan, entre marzo y octubre, meses en los que se desató la pandemia, familias jornaleras guerrerenses migraron a campos agrícolas de Sonora, Baja California, Nayarit, Zacatecas, Chihuahua, Jalisco, Sinaloa y Michoacán.
En octubre, migraron a Sinaloa 980 personas, la mayoría habitantes de Cochoapa El Grande y Metlatónoc, dos de los municipios más pobres de México; en septiembre, partieron 80 personas a Michoacán, 54 a Chihuahua y 22 a Baja California.
La mayoría de los migrantes en esta temporada es de la población indígena náhuatl, con un total de 807 personas, le siguen 167 personas nasavi y 119 me’phaa. Por otro lado, se registró que todos los migrantes, 349, tienen entre 18 y 25 años de edad, 286 cuentan con una edad de 26 a 40 años.
Mientras que los menores de edad son 150 de 6 a 12, años, 79 de 3 a 5 años y 92 recién nacidos a 2 años; se trata de una migración familiar para trabajar en los campos agrícolas. De todos los migrantes sólo 218 personas terminaron la primaria, 133 la secundaria y sólo 39 el bachillerato.