Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
A nueve años del asesinato de Gabriel Echeverría de Jesús y Jorge Alexis Herrera Pino, padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos e integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM), junto con activistas, protestaron en la capital.
La avanzada de la marcha, conformada por estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa irrumpió en la sede del Comité Ejecutivo Estatal del PRD, incendió el mobiliario y destrozó las instalaciones, en protesta por la impunidad del caso que fue calificado como de “autoría indefinida”, por lo que ninguno de los implicados fue procesado.
La manifestación comenzó con una marcha que partió desde el monumento a Nicolás Bravo, conocido como “El Caballito”, en la avenida Insurgentes al norte de la ciudad, y concluyó con un mitin en el bulevar Vicente Guerrero, en el Parador del Marqués; donde se llevó a cabo una misa por el noveno aniversario luctuoso de los dos estudiantes; así como un mitin en el que los manifestantes exigieron justicia.
En el recorrido, los manifestantes irrumpieron en la sede del Comité Ejecutivo Estatal del PRD, donde un grupo de normalistas se brincó la barda para destrozar las instalaciones; mientras que otros impidieron el paso de periodistas que cubrían la protesta.
Sillas, escritorios y documentación, fue lo que los normalistas incendiaron; la oficina que fue asignada como casa de precampaña del aspirante a la gubernatura de Guerrero, Evodio Velázquez Aguirre, así como la asignada para el presidente del Comité Ejecutivo Estatal del PRD, Celestino Cesáreo Guzmán, quedaron totalmente destrozadas.
Personal de Protección Civil del Gobierno del Estado y bomberos llegaron a las instalaciones, ubicadas en la avenida Miguel Alemán, para sofocar las llamas; en la zona se observó a un grupo de la Guardia Nacional frente a la clínica del IMSS, que al notar la presencia de los manifestantes, se retiró.
Los manifestantes hicieron un mitin frente al antimonumento a los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa desparecidos en septiembre del 2014 en Iguala, que se instaló en Las Banderas, y otro más en el Parador del Marqués, en el que señalaron que el aspirante a la candidatura a la gubernatura de Guerrero por Morena, Alberto López Rosas, no puede ser considerado debido a que lo califican como “asesino”.
El caso del asesinato de Gabriel Echeverría y Jorge Alexis Herrera fue calificado como de “auditoría indefinida”; es decir, que ninguno de los presuntos responsables fue procesado, debido a falta de pruebas. Ambos estudiantes fueron asesinados el 12 de diciembre de 2011, durante un desalojo en el que policías federales y estatales dispararon en contra de los normalistas.
Durante la manifestación, los normalistas señalaron que “no es posible” que “un asesino” sea candidato a la gubernatura al Estado de Guerrero, en referencia a Alberto López Rosas, quien fungía como procurador de la entidad, cuando ocurrieron los hechos.
En el Parador del Marqués se llevó a cabo una misa, por el aniversario luctuoso de los dos jóvenes, seguido de un mitin en el que sus familiares exigieron justicia y el cese de los ataques en contra de los estudiantes.