Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
El caso de la denuncia contra el precandidato de Morena a la gubernatura de Guerrero, Félix Salgado Macedonio, por su presunta responsabilidad en la comisión del delito de violación dolosa en agravio de una ex trabajadora del periódico La Jornada Guerrero, deja en evidencia la impunidad y la crisis política que se vive en el estado, coincidieron feministas.
Consultadas por separado, la coordinadora del Observatorio de Violencia contra las Mujeres “Hanna Arendt”, Rosa Icela Ojeda Rivera, la coordinadora del Observatorio Ciudadano de Violencia hacia las Mujeres en Guerrero, Viridiana Gutiérrez Sotelo, y la presidenta de la Alianza Feminista de Guerrero, Marina Reyna Aguilar, consideraron que la denunciante está siendo revictimizada.
Aunque se desconoce si la carpeta de investigación del caso fue filtrada de manera íntegra con el consentimiento de la víctima, las feministas declararon que se debe promover el “Yo te creo”, pues a la denunciante se le está colocando en una posición vulnerable.
Ojeda Rivera señaló que hay tres panoramas en torno al caso y la manera en la que se expone públicamente en tiempos electorales; primero, que la situación no habría sido considerada de no ser por los avances que son resultado del movimiento feminista, “en muchísimas precampañas y campañas político-electorales hemos visto que los candidatos han hecho gala de misoginia, de homofobia, de falocentrismo y han sido como bienvidos y nadie había dicho nada, estamos en un momento diferente”.
En segundo lugar, la también académica de la Universidad Autónoma de Guerrero, advirtió que hay una crisis en los partidos políticos, que desemboca en un cuestionamiento en cuanto a lo que éstos pueden ofrecer a la sociedad, “esta crisis implica que no nos pueden ofrecer mucho”.
Recordó que Morena tenía como propuesta a “una persona con poco arraigo” en Guerrero y ahora, “una persona que está acusado de haber ejercido violencia sexual y que además, en otros momentos, en otras campañas, lo central de sus campañas ha sido esa hipersexualización, de ahí viene este nombre de ‘El Toro’”.
En tercer lugar, “en esta crisis los partidos políticos no han sido capaces de ofrecernos una candidatura acorde al momento, es decir, es un momento de paridad de género y no nos pueden decir ‘es que no hay mujeres que puedan aspirar al cargo’, no hay mujeres en el sistema de partidos”.
Además, dijo que el caso de la denuncia contra Salgado Macedonio y la filtración de la misma confirman lo que ya habían señalado las feministas en Guerrero, “que no hay autonomía de la Fiscalía (General del Estado), quedó clarísimo a confesión de parte y sin confesión de parte”.
Por su cuenta, Marina Reyna declaró que hay muchos intereses, principalmente políticos, en torno al caso, tanto por las personas que quieren que sí queden “determinados candidatos” como por las que no los quieren, pero antes que nada “se debe cuidar a la víctima, a mí me preocupa la víctima”.
Informó que ya hay un avance en la incorporación de los lineamientos del Artículo “3 de 3 contra la violencia de género” en Guerrero, mediante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado, por lo que “ahí es donde tienen que salir a dar la cara” quienes tengan algún señalamiento por incurrir en delitos contra las mujeres.
En tanto, Gutiérrez Sotelo dijo que se trata de “un asunto sin precedentes porque estamos en medio de un contexto electoral y obviamente, Morena es el partido que tiene las preferencias electorales (…), hay muchos actores de primer nivel involucrados, eso a mí me preocupa mucho” debido a que se dejó en evidencia que, aunque haya denuncia, “las mujeres no podemos acceder a la justicia”.
La activista expresó que “la aberración” de filtrar la carpeta de investigación sin ningún tipo de censura para preservar la identidad de la víctima “la vulnera por supuesto, yo en su lugar no querría ni asomar la cara”, puesto que está expuesta a ataques para defender una postura política.
Finalmente, las feministas declararon que la FGE debe investigar el caso y judicializar la denuncia para que se pueda resarcir el daño a la víctima; mientras que los implicados deben asumir su responsabilidad y también ser investigados por su presunta participación en la omisión del caso, así como en su filtración con fines políticos.