Alberto Gómez/ Chilpancingo, Gro.
Enfermeras del hospital general de Chilpancingo, Raymundo Abarca Alarcón, protestaron esta mañana para denunciar irregularidades en la convocatoria emitida para designar a la nueva jefa de enfermeras, y señalaron que las autoridades buscan atender intereses políticos y personales, dejando de lado los méritos académicos, profesionales y laborales.
Las inconformes protestaron al interior del hospital cerrando el área de la jefatura para impedir que la nueva jefa de enfermeras realizara su labor, a quien además acusaron de no haber ejercido nunca como enfermera en el hospital, solo en el área de enseñanza, como docente.
Señalaron que quienes tomaron la decisión para elegir a la nueva jefa dejaron en la mesa sin revisar expedientes de enfermeras que han dejado su vida en el quirófano, con maestrías, y experiencia laboral, pero que no tienen padrinos políticos.
Afirmaron que la nueva jefa de enfermeras es del mismo grupo que la anterior jefa Amelia Torres, señalada de hostigamiento laboral, maltrato a las compañeras y de tráfico de influencias en promociones y otros beneficios laborales.
Las enfermeras exigieron que se restaure el proceso y se de trámite a una impugnación que promovieron desde el mes de diciembre, debido a que la convocatoria tuvo vicios de orígen, como el hecho de que se emitió en período de vacaciones y sin la difusión correcta a pesar de eso hubo al menos seis currículos con mayores méritos que el de la persona que fue designada.
Finalmente, las inconformes aseguraron, “no vamos a permitir la imposición y si es necesario vamos a detener todo el servicio que presta el hospital, porque no podemos prestar atención si nosotros mismos no la tenemos”.