Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) inhabilitó tres de las doce bombas que hay en la Gasolinera Carreto 1, ubicada en la avenida Lázaro Cárdenas de la capital, por entregar menos gasolina de que la que cobra a sus clientes.
Alrededor de las diez de la mañana de este sábado, personal de la Profeco y transportistas llegaron a la gasolinera que se encuentra frente al Hotel “Parque Sur” y a un costado de Office Depot, en donde se inspeccionaron todos los dispensadores de gasolina.
Luego de la revisión, la Profeco comprobó que en tres de las bombas, cuyo nombre técnico es “instrumento”, dos de Magna y una de Premium, se entregaban entre 110 y 160 mililitros menos de gasolina por cada 20 litros de venta.
De acuerdo con los inspectores, la tolerancia en la venta de gasolina es de 100 mililitros más o menos por cada 20 litros de venta, por lo que procedieron a colocar sellos en los tres instrumentos donde se detectó la irregularidad, así como a levantar el acta correspondiente.
El presidente del Grupo Chilpo, Adrián Alarcón Ríos, aseguró que mediante un software los administradores de las gasolineras pueden manipular las cifras de cada dispensador, por lo que pidió a los inspectores que se registraran las oficinas; sin embargo, el personal de la Profepa no está facultado para realizar esa revisión.
Adrián Alarcón declaró que los transportistas se mantendrán en alerta máxima durante los próximos días, pues se espera que el personal de la Profepa continúe con los operativos en otras estaciones, en el transcurso del domingo y lunes.
En ese sentido, los inspectores aclararon que sólo pueden acudir a las gasolineras en las que se hayan denunciado anomalías.
Los transportistas argumentaron que durante años la Gasolinera Carreto 1 ha “robado” y “defraudado” a los consumidores, con precios altos, de manera impune, por lo que llamaron a la sociedad a no abastecerse de combustibles en esa estación que ha sido reconocida por solidarse con la ciudadanía en momentos críticos.
En el 2017, los administradores de la Gasolinera Carreto 1 regalaron combustible a los brigadistas que se desplazaron a las zonas afectadas por el temblor del 19 de septiembre; mientras que el año pasado, al inicio de la pandemia, repitieron esa acción con el personal del sector salud que combate la Covid-19.
Los inspectores informaron que los administradores deberán acudir a las oficinas en la Ciudad de México, para realizar los trámites correspondientes para que se levanten los sellos y pagar una multa por la irregularidad, en el caso de ser asignada.