Ángel Galeana/Chilpancingo
El presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso, Alfredo Sánchez Esquivel, informó que la administración del Poder Legislativo está preparando los expedientes para iniciar demandas en contra de los responsables de la toma del edificio, la cual, dijo, es un asalto, dado que, en términos de la ley, no se trata de una huelga.
En conferencia de prensa en un salón de Chilpancingo, Sánchez Esquivel informó que cuenta con dos actas certificadas por notario público en las que consta la toma de edificio, y las cuales servirán en el expediente que está integrando para poner la demanda ante instancias correspondientes. El diputado señaló que no habrá diálogo con los manifestantes si este es a base de chantaje o amedrentamiento.
Explicó que la protesta de los trabajadores que inició el pasado miércoles no tiene razón de ser dado que de las dos demandas laborales principales, una ya se atendió y está firmada por los representantes sindicales de la sección 55 del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), que tiene que ver con el aumento al salario del 3.15%, el cual ya se pagó con retroactivo a febrero.
La otra demanda, referente al pago del bono del Día de la Secretaria, indicó que sí se va a pagar el día que corresponde, que es mañana 17 de julio, sin embargo, los trabajadores la exigieron el 14 de julio, es decir, fuera del tiempo.
Sánchez Esquivel reiteró que la protesta de los sindicalizados tiene un origen político, pero al ser cuestionado sobre quién sería el responsable de azuzarlos, dijo: “quiero pensar que no hay un externo azuzándolos, que es el propio sindicato, sino, entonces, tendrían que rendir, los líderes sindicales a sus agremiados que se prestan a atender indicaciones de un externo que no es otra cosa que el propio trabajador”.
Sobre las denuncias, dijo que tienen claro quiénes son los trabajadores que participan y quiénes son los que encabezan, y reiteró que la solución del conflicto será en los tribunales.
Sánchez Esquivel dijo que no se puede considerar que la protesta de los trabajadores sea una huelga dado que están dentro del inmueble y lo mantienen tomado, no hay banderas rojinegras, no hubo un emplazamiento ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, no se han violado sus derechos dado que pagaron en tiempo y forma el incremento salarial y el bono que solicitan no está en fecha, entre otros supuestos establecidos en la Ley del Trabajo de los Servidores Públicos del Estado de Guerrero.
Resaltó que la Ley establece que “los actos de coacción y violencia física o moral sobre las personas o de fuerza sobre las cosas cometidos por los huelguistas tendrán como consecuencia, respecto de los responsables, que se dejen sin efecto sus nombramientos”, supuesto que dijo se cumple con la exigencia de los trabajadores de aumento de sueldo y el bono del Día de la Secretaria, dado que el primero ya se otorgó y el otro está fuera de tiempo”.
El diputado responsabilizó a quienes tienen tomadas las instalaciones “de todo aquello que pueda en el Congreso dañarse, afectarse, perderse, mal utilizarse” porque son quienes tienen el control del edificio y han impedido el acceso a los representantes patronales.
“Esto ya ha sido certificado mediante notario público, quien certificó que los accesos al Congreso está impedidos”, dijo.
A las instalaciones del salón donde se realizó la conferencia de prensa arribó un pequeño grupo de manifestantes que mantiene tomado el Congreso, quienes estuvieron por espacio de 20 minutos a las afueras del inmueble y después se retiraron sin mayores acciones.