Detienen a Bruno Plácido, es acusado de robo y daño a víctimas

Alina Navarrete Fernández/Ángel Galeana

Chilpancingo

La Fiscalía General del Estado cumplimentó una orden de aprehensión en contra del líder de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio, por el delito de robo específico y daños en agravio de diversas víctimas, hechos ocurridos en Tlapa en 2016.

En un reporte, la Fiscalía informó que será puesto a disposición del Juez Mixto de Primera Instancia del Distrito Judicial de Morelos, en el municipio de Tlapa.

La dependencia no brindó mayor información.

La detención ocurrió este martes en Chilpancingo. Bruno Plácido estuvo hoy en el Encuentro y Festival de Culturas e Identidad que organizaron los tres órdenes de Gobierno con motivo de Día Internacional de los Pueblos Indígenas, el cual se realizó en zócalo a las 11 de la mañana.

En las fotografías que difundió la Fiscalía estatal ya detenido, aparece con la misma ropa con la que se presentó en el zócalo.

Bruno Plácido en el Encuentro y Festival de Culturas e Identidad esta mañana en el zócalo de Chilpancingo

Nacimiento de la autodefensa de la UPOEG y recientes conflictos

La Policía Ciudadana de la UPOEG se presentó el 5 de enero del 2013, sus integrantes colocaron retenes en Ayutla para enfrentarse a la delincuencia organizada que opera en la región Costa Chica, debido a los asesinatos, secuestros y extorsiones que afectaban a la población.

Bruno Plácido es el dirigente principal de la organización que, según él, tiene presencia en al menos 20 municipios en los que se desplegaron más de 4 mil policías ciudadanos y que en las últimas semanas, ha sido señalada por vínculos con el grupo delincuencial “Los Rusos”, así como oponerse a operativos implementados por el Ejército, Guardia Nacional y Marina, bajo el argumento de que los elementos de esas corporaciones incurren en abuso de poder.

El pasado 5 de mayo, la Policía Ciudadana de la UPOEG retuvo cerca de dos horas a personal de la Marina en Marquelia, luego de que los agentes intentaran detener a uno de sus integrantes por usar ropa distintiva de las Fuerzas Armadas, el alcalde Lincer Casiano Clemente tuvo que intervenir para evitar un conflicto en la zona.

El 28 de junio, se registró un enfrentamiento entre la UPOEG contra el Ejército y la Guardia Nacional en Marquelia. Tras los hechos 7 integrantes de la organización fueron detenidos por portación de armas de uso exclusivo del Ejército, agresiones armadas y otros delitos, entre ellos el comandante, Jesús Calleja, quien también tiene una orden de aprehensión por asesinato contra el activista Luis Donato Ortiz.

Nueve días después, el subsecretario de Seguridad Pública federal, Ricardo Mejía Berdeja, informó que los siete detenidos y un octavo miembro más que fue detenido el pasado 13 de mayo en Oaxaca tienen nexos con “Los Rusos”; todos fueron vinculados a proceso.

El 2 de agosto, integrantes de la UPOEG atacaron a balazos a un convoy de la Policía Ministerial en el poblado de Tres Palos en Acapulco, el cual era encabezado por el vicefiscal Ramón Celaya Gamboa, quienes acudieron a respaldar a elementos de la Policía Estatal en un bloqueo de taxistas.

Fue el funcionario quien responsabilizó directamente a integrantes de la UPOEG de disparar en su contra.

Un día después, en conferencia de prensa, Celaya Gamboa afirmó que ha sido reiterada la actuación de la UPOEG “con tientes de delincuencia organizada”, y que la Fiscalía tenía órdenes de aprehensión contra integrantes de la organización que buscarían cumplimentar.

El funcionario vinculó a la UPOEG con el grupo delictivo Los Rusos, grupo que dijo, genera inestabilidad en Acapulco y la región de la Costa Chica junto «las llamadas policías comunitarias».

El mismo 3 de agosto, Bruno Plácido afirmó que había infiltrados en el Gobierno del estado que pretendían desestabilizar la administración y «derrocar» a la UPOEG, y reveló que el 2 de agosto acordó una «mesa jurídica» con el secretario General de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso, en la que revisarían la presunta infiltracion de la UPOEG por grupos delictivos.

Dijo que si la Fiscalía tenía pruebas en su contra que lo detuvieran, pero en caso de no demostrarle delitos que le repararan los daños.

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