Ángel Galeana/Chilpancingo
Foto: Archivo
El vicefiscal de la Fiscalía General del Estado, Ramón Celaya Gamboa, rechazó que la detención del dirigente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio, sea una “persecución política o revanchismo” y fue detenido por el requerimiento de un juez.
Entrevistado en el noticiero de la televisión del estado, Radio y Televisión de Guerrero, Celaya Gamboa indicó que la detención de Bruno Plácido ocurrió alrededor de las 4 de la tarde en Chilpancingo, quien no se resistió al momento de ser capturado.
Reiteró que Plácido Valerio tiene una orden de aprehensión dictada por un juez del municipio de Tlapa, por los delitos de robo específico y daño en propiedad ajena, acusación que hizo un ciudadano en su contra.
Celaya Gamboa indicó que la orden de aprehensión no se cumplimentó por anteriores administraciones en la Fiscalía estatal por una razón que desconoce, pero en la actual administración perseguirán los delitos y aprenderán a quien tenga una orden en su contra.
Precisó que Bruno Plácido solo tiene una orden de aprehensión por delitos del fuero común, y tiene varias capetas de investigación que están en desarrollo, pues aseguró que el líder comunitario ha sido denunciado varias ocasiones por “ciudadanos que han sido violentados”.
Indicó que es posible que en el fuero federal haya alguna orden de aprehensión porque varios de los delitos que ha cometido la policía comunitaria son de orden federal, pero dijo desconocer esos procesos.
Confirmó que Bruno Plácido fue enviado a Tlapa y una vez realizados los procedimientos correspondientes fue ingresado al Centro de Reinserción Social en donde enfrentará su proceso judicial.
Ramón Celaya se refirió que no hay revanchismo o persecución política contra Bruno Plácido, debido a que la UPOEG ha sido acusada en diversas ocasiones por el vicefiscal y por el Gobierno federal de estar infiltrada por grupos delictivos, principalmente por Los Rusos; además del enfrentamiento que sostuvieron elementos de la Policía Ministerial contra integrantes de la UPOEG el 2 de agosto en la localidad de Tres Palos de Acapulco.