Evaristo García, 18 años entre reparación de alcantarillas y mantenimiento de parques

Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.

Evaristo García Dircio pasa los días entre el taller de Servicios Públicos y las calles de Chilpancingo reparando alcantarillas y parques, para mejorar las condiciones de la ciudad.

Evaristo es originario de Chilpancingo, actualmente reside en la colonia El Salado con su esposa y sus cuatro hijos, y trabaja como auxiliar administrativo, adscrito al área de soldadura, en el Ayuntamiento.

Su oficio lo aprendió en la práctica y gracias a las capacitaciones que recibió por parte de distintas empresas privadas, como Grupo Yoli, antes de conseguir su puesto en el gobierno municipal.

En entrevista con Réplica, Evaristo recordó que logró ingresar al Ayuntamiento gracias al expresidente municipal Mario Moreno Arcos, a quien tuvo acceso en una audiencia pública; sin embargo, fue durante el gobierno de Norma Otilia Hernández Martínez que obtuvo su basificación, luego de 18 años de servicio.

Para Evaristo su empleo es algo cotidiano que disfruta todo el tiempo, “para mí el trabajo no lo veo como algo pesado, me han enseñado que el trabajo es un gusto”.

Su trabajo consiste en la reparación de alcantarillas, dar mantenimiento a los camiones, parques con juegos metálicos y también brinda apoyo a otras áreas del Ayuntamiento, pero “la mayor parte del trabajo es las alcantarillas, eso es lo más pesado”.

A pesar de que no cuenta con un horario fijo, debido a que puede iniciar su jornada desde las 6 de la mañana, Evaristo disfruta su labor; en ocasiones, visita colonias revisando las condiciones en las que están las alcantarillas, “cuando ya los materiales están colapsado las elaboramos nuevas”.

El hecho de no sólo reparar sino también fabricar desde cero las alcantarillas es lo más complicado de su labor; en ese sentido, Evaristo llamó a la ciudadanía a que “cuiden las alcantarillas no echándoles basura, líquidos o residuos de comido, eso las carcome”.

A pregunta expresa de cómo le beneficia contar con su basificación, Evaristo dijo que “lo veo yo como un patrimonio para mi familia, estoy contento, veo que alguien tuvo visión en reconocer mi trabajo, entiendo que de ese lado valoraron el esfuerzo que realizamos aquí en el día a día”.

Finalmente, reiteró que “el beneficio es para mi familia, para mis niños, para llevar el sustento a la casa, ha habido carencias y hoy le doy gracias a Dios de que nos hayan tomado en cuenta en esta basificación para que ya no falten algunas cosas”.

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