Ángel Galeana/Chilpancingo
El alcalde de Cuajinicuilapa, Hildeberto Salinas Mariche, reapareció este lunes en una reunión de seguridad con funcionarios del gobierno estatal, luego de haber pedido licencia desde el pasado 29 de octubre para separarse del cargo por amenazas en su contra y un contexto de violencia en el municipio.
El Gobierno estatal informó en un comunicado que el secretario de Seguridad Pública, Josué Barrón Sevilla y el subsecretario de Desarrollo Político y Social, Francisco Rodríguez Cisneros, se reunieron con el alcalde para establecer nuevas acciones de prevención del delito.
«En el encuentro, donde también estuvo presente el encargado de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, Alejandro Higuera Sandoval, se revisaron las condiciones de seguridad en el municipio a fin de establecer nuevas acciones de prevención del delito», señala el comunicado.
El alcalde, emanado del Partido Verde Ecologista de México había pedido licencia para separarse del cargo apenas un mes después de rendir protesta por una serie de amenazas hacia él y agresiones en contra de funcionarios del Ayuntamiento.
Sin embargo, la licencia no fue aprobada por el Congreso porque no se ratificó, procedimiento que no está en la ley pero sí es un acuerdo interno, a fin de dar certeza a las licencias, toda vez que en legislatura anteriores se presentaron falsas solicitudes, según explicó en su momento el presidente de la Junta de Coordinación Política, Jesús Uriostegui García.
Aunado al alcalde, también la síndica Estephani Oliva Zárate pidió licencia para separarse del cargo, sin embargo, se desconoce si ella regresará al igual que el alcalde.
Se intentó contactar al dirigente del Partido Verde en el estado, Alejandro Carabias Icaza, para conocer las condiciones en las que reapareció el acalde y la situación de la síndica, pero no respondió.
Entre los hechos de violencia contra funcionarios del Ayuntamiento de Cuajinicuilapa destacó que, la madrugada del 12 de octubre, se reportó que un grupo delictivo incendió un vehículo y una casa del tesorero, Roberto Avelino Vargas, quien después de la agresión huyó del municipio junto a su familia. Tampoco se conoce si ya se reincorporó al cargo.
Según medios de la región, el alcalde estará custodiado por elementos de la Guardia Nacional para poder ejercer.