Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
El gobernador Héctor Astudillo Flores difundió ayer la estadística del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) sobre presuntos delitos de feminicidio del periodo enero-marzo de 2021, que coloca a Guerrero en los últimos lugares, pero omitió otras cifras en la que el estado resalta entre los primeros puestos nacionales, en violencia contra las mujeres.
al mediodía, durante la conferencia de actualización del Panorama Estatal ante la Covid-19, Héctor Astudillo dijo que el feminicidio “no es un tema grato, no es un tema estimulante pero al final de cuentas, vale la pena comentarlo”, pues ocupó el lugar en 26 presuntos delitos de feminicidio, con una tasa de 0.21 casos por cada cien mil habitantes.
La cifra fue presentada por la titular de la Secretaría de la Mujer, Mayra Martínez Pineda, en la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz, como un logro del actual gobierno priista.
No obstante, según la Información sobre violencia contra las mujeres (Incidencia delictiva y llamadas de emergencia 9-1-1) del SESNSP, actualizada este martes, de enero a abril de 2021, Guerrero ocupa el séptimo lugar nacional en presuntas víctimas mujeres de homicidio doloso, con una tasa de 2.06 casos.
El estado también ocupa el séptimo lugar en presuntas víctimas mujeres de homicidio culposo, con una tasa de 2.32 casos, y el tercero en presuntos delitos de violencia de género en todas sus modalidades distinta a la violencia familiar, con 1.83 casos. Todas las tasas son por cada cien mil habitantes y rebasan la media nacional.
Mientras que Chilpancingo, Acapulco, Juchitán y Pilcaya están entre los primeros cien municipios del país con más casaos de presuntos delitos de feminicidio.
Consultada sobre la situación, la coordinadora del Observatorio Ciudadano de Violencia hacia las Mujeres, Viridiana Gutiérrez Sotelo, consideró “insultante” que Héctor Astudillo celebrara la disminución de una cifra cuando: “La realidad es que a las mujeres las siguen asesinando, desapareciendo, las siguen violando”, como consecuencia de la desatención de su administración.
En los últimos cinco años que el priista ha gobernado, la violencia feminicida ha incrementado al grado de que hay casos de víctimas de feminicidio infantil, como Ayelin “N”, en Tixtla, y Tomasa “N”, en Cuajinicuilapa, así lo expuso la activista.
Viridiana Gutiérrez recordó que, de acuerdo a la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por el caso de Mariana Lima Buendía, asesinada en 2015, todos los asesinatos de mujeres deben investigarse como “presunto feminicidio” y con perspectiva de género, para así descartar que se trata de ese crimen, pero las autoridades no cumplen con este requerimiento y por ello las cifras son aparentemente bajas.
Finalmente, recordó que Guerrero cuenta con dos Alertas de Violencia de Género y Héctor Astudillo “se va” sin cumplir con el cien por ciento de las recomendaciones hechas por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres.