Alina Navarrete Fernández/Xalpatláhuac, Gro.
Xalpatláhuac es uno de los 17 municipios en los que, según las autoridades estatales, hay condiciones para reanudar las clases presenciales debido a que cuentan con 0 casos activos de Covid-19, así como 26 contagios confirmados acumulados y 3 defunciones desde que inició la pandemia, pero los habitantes viven otra realidad.
En la cabecera, incrustada en la zona Náhuatl de la Montaña Alta, ubicada a poco más de cuatro horas de distancia de la capital, en automóvil, el director de Salud Municipal, Jorge Medellín Nájera, asegura que hay “por lo menos” cien casos activos de Covid-19 y unas 55 personas han fallecido, sin que se tenga certeza de si fue por la enfermedad viral o no.
Jorge Medellín dice que la gente “no cree” en la Covid y se rehúsa a mantener las medidas sanitarias, como el uso de cubrebocas y la sana distancia. También hay casos de personas que presentan toda la sintomatología del SARS-CoV-2, pero prefieren ocultarlo para evitar el rechazo social.
“Hay gente que se está recuperando y hay gente que por falta de recursos se está muriendo”, afirma. La situación se complica con las defunciones ante el riesgo de contagio, aunque “hay mucha gente precavida que se abstiene de ir a funerales.
“Antes, se hacían las fosas con pico y pala, ahora ya meten máquina”, debido a la incertidumbre del motivo de la muerte. Las familias no cuentan si la persona que falleció tenía Covid o síntomas, u otro padecimiento, según Jorge Medellín, es por esta situación que no hay un registro real de los decesos.
De acuerdo con el funcionario, de las 15 localidades del municipio sólo Amatitlán y La Victoria no tienen Centro de Salud; en la cabecera sólo hay uno especializado en atención obstétrica y también cuenta con pruebas rápidas para detectar la Covid-19, pero éstas sólo se aplican si los pacientes las aceptan, de lo contrario, se guardan aunque las personas tengan la tos, fiebre y dolores propios de la enfermedad viral.
Jorge Medellín sostiene que ninguna autoridad se ha comunicado con el Ayuntamiento para informar que en Xalpatláhuac hay condiciones para reabrir las escuelas, todo lo que saben es mediante las noticias.
La regidora de Educación del municipio, Balvina Leonor Martínez García, señala que en la cabecera hay dos jardines de niños, una primaria con dos turnos (matutino y vespertino), dos secundarias, una Preparatoria Popular y un plantel del Colegio de Bachilleres, que podrían reabrir sus instalaciones el próximo 30 de agosto, pero “no hay condiciones.”
“Yo lo veo un poco complicado ya que los niños no están vacunados y luego, pues a los maestros les falta otra vacuna (…) Las escuelas no tienen las mismas condiciones para regresar a clases”, asegura Balvina Martínez.
La semana pasada, el director del turno matutino de la primaria bilingüe “Vicente Guerrero”, Antonio Rosendo Campos, encabezó reuniones con los 19 docentes de la escuela para estudiar la Guía para el regreso responsable y ordenado a las escuelas, que la Supervisión Escolar 024, que pertenece al Sector 06 Náhuatl Tlapa, les proporcionó.
Dicha guía incluye información básica sobre la Covid, técnica de lavado de manos, uso adecuado del cubrebocas, cómo elaborar uno casero, la integración del Comité Participativo de Salud Escolar y todos los filtros sanitarios que se deben implementar en los planteles el próximo ciclo escolar 2021-2022.
Aunque Antonio Rosenda dice que las madres de familia están felices por la reapertura de la escuela, las instalaciones no cuentan con lavamanos ni servicio de agua y actualmente están seis aulas en proceso de construcción, por lo que alrededor de las instalaciones hay grava, arena, cemento, mallas y otros objetos propios de la obra que a todas luces representan un riesgo para los menores de edad.
El director no ve mayor problema, “agua no tenemos, lavabos no tenemos, pero yo creo que si hay esa posibilidad, pues crear esas condiciones, ya estamos viendo ahorita qué acciones vamos a hacer, a lo mejor cada grado, grupo, su cubetita con su leyenda, su grado, grupo, su jabón y todo, pero si nosotros queremos ya todo bien acondicionado, yo creo que no vamos a hacer nada.”
Para llevar lo necesario al plantel, Antonio Rosenda echará mano de las madres de familia y considera que el regreso a clases presenciales tendrá que ser escalonado, es decir, se fragmentarán los grupos, ya que en promedio cada uno cuenta con 25 menores y el espacio de las aulas no permite que estén todos en el mismo momento, guardando la sana distancia.
El optimismo del director choca con el temor de las madres de familia, aunque ellas mismas tienen posturas distintas, pues mientras unas están en contra de que sus hijas e hijos vuelvan a las escuelas por el riesgo de contagio, otras como Brenda Gómez Aguilar desean que se concrete la apertura pues la educación a distancia no ha sido ideal.
“Como tengo que trabajar, no puedo dedicarme solo a mi niño por eso sí estaría bien que regresaran, yo antes les decía a las señoras ‘hay que organizarnos’ (…) No todos tenemos televisión, aquí cada quien tiene que tener su cable, si uno quiere ver la televisión tiene que tener su atenta, yo no tengo”, contó la señora Brenda, quien se dedica a la venta de pollo a unos pasos del Ayuntamiento.
Para ella, su hijo “supuestamente” pasó de pasó de sexto grado de primaria a primer grado de secundaria, está convencida de que no aprendió todo lo que debió en la escuela, por eso está a favor del regreso a clases presenciales y contribuirá para que éste se logre pues “ya fue mucho descanso para ellos.”