Alberto Gómez/Chilpancingo
Choferes del transporte público en la capital pidieron que haya paz, durante una peregrinación en honor a la virgen de la Asunción de María, que mañana se celebra.
Las unidades Urvans y Taxis suspendieron el servicio un momento para participar en la peregrinación que año con año se realiza en Chilpancingo previo a los festejos patronales. Este 2023 el contexto es distinto, y es que alrededor de 18 choferes fueron asesinados en el último mes producto de las pugnas entre grupos delictivos.
La peregrinación fue encabezada por transportistas a pie que portaban una lona en la que pedían a la Virgen de la Asunción mayor protección y seguridad para su labor que diariamente realizan.
El señor Francisco Santana, con más de 20 años en el servicio público, dijo que bendecir su unidad le brinda mayor seguridad, paz y seguridad, «Queremos que haya paz para Chilpancingo, por eso participamos en la peregrinación a la virgen».
Por su parte, Antonio Arizmendi, transportista con más de 15 años de experiencia, dijo: «pedimos mayormente seguridad desde el cielo para nosotros (…) desde que inicié en el taxi cada año estamos participando consecutivamente».
Para algunos transportistas la bendición que reciben por parte de los sacerdotes asegura paz y tranquilidad tanto para los choferes como para la ciudadanía que diariamente usan el transporte público.
Adornadas con cadenas de cempasúchil y ramos de rosas, las urvans transitaron sobre la calle Abasolo, en el centro de la ciudad, y una a una fueron bañadas con agua bendita; además, los choferes portaron un moño negro sobre la manga de su camisa en señal de luto por sus compañeros que perdieron la vida en los ataques la semana pasada.