Ángel Galeana
Chilpancingo, Gro. 27-Agosto-2019
El gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores, informó que ya tomaron medidas para evitar que una situación como la que se presentó en el caso de Coyuca de Catalán, donde fueron escondidas 2 mil 700 balas, modulares de visión nocturna y una mira telescópica en despensas del DIF, vuelva a ocurrir.
En entrevista en Chilpancingo, el gobernador indicó que trataron el tema en la mesa estatal de Coordinación para la Construcción de la Paz, en donde determinaron que cada misión que sea acompañada por elementos policíacos o de las Fuerzas Armadas sea revisada de manera minuciosa.
“Lo que aconteció es algo que llama la atención, o sea, vengan a ayudarme, acompáñenme y llevamos cartuchos y llevamos municiones, y eso es un asunto altamente delicado. La recomendación que hemos hecho en mi carácter de gobernador, del coordinador de la Mesa para la Pacificación y la Justicia es que, cada vez que alguien pida este tipo de ayudas, hay que ponerle mucho cuidado, y si alguien pide incorporarse a un convoy que va en auxilio de una población, hay que revisarlo minuciosamente qué lleva”, indicó.
El gobernador narró que el acompañamiento de policías y soldados fue una recomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, instancia a la que le fue solicitada la ayuda. La Comisión recomendó al Gobierno del estado que de manera urgente apoyaran a los pueblos, especialmente a la comunidad de Zihaquio, por lo que fueron enviadas las fuerzas de seguridad, las cuales se integraron al convoy que llevaba las despensas y las balas.
“Se sumaron al convoy en pocas palabras, porque llevaban víveres. Obviamente en otro lugar sabían que llevaban cosas que no precisamente eran correctas. Hay personas detenidas por este acontecimiento, están en la ruta de la Fiscalía General de la República, no es un asunto que no nada más pasó, hay responsables”.
Hasta el momento la Fiscalía General de la República no informado la situación legales de las tres personas que fueron detenidas por los hechos.