Ángel Galeana/Chilpancingo
El ex procurador de justicia de Guerrero, durante el gobierno de Ángel Aguirre Rivero, Alberto López Rosas, defendió su inocencia sobre los asesinatos de dos normalistas de Ayotzinapa el 12 de Diciembre del 2011 en Chilpancingo, al señalar que ya fue investigado y absuelto de toda responsabilidad, e hizo un llamado a las víctimas a no buscar culpables en Guerrero.
López Rosas, quien aspira a ser candidato a gobernador por Morena, ofreció una conferencia de prensa en Chilpancingo para fijar postura sobre la declaración que hicieron el pasado 26 de septiembre «Los Olvidados de Ayotzinapa» en Chilpancingo, al conmemorar el mes 52 de la desaparición de los 43 estudiantes en Iguala.
Los Olvidados de Ayotzinapa declararon que «los familiares de las víctimas no van a dejar en paz al ex procurador Alberto López Rosas», al considerar que él y otros personajes del gobierno estatal tuvieron responsabilidad en el asesinato de los dos normalistas, Gabriel Echeverría de Jesús y Alexis Herrera Pino.
Al respecto, López Rosas argumentó que él y otros integrantes de la entonces Procuraduría General del Estado fueron sometidos a investigación y posteriormente absueltos.
Reiteró su acusación de que la entonces Procuraduría General de la República no tomó en cuenta videos que muestran la participación de la Policía Federal en el desalojo que culminó en el asesinato de los normalistas.
Además, señaló que Genaro García Luna, entonces secretario de Seguridad Pública federal, y Raúl Placencia, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, confabularon para manipular las investigaciones del caso.
«Es cierto que existe un estado de impunidad ante los lamentables acontecimientos del pasado 12 de diciembre de 2011 en que perdieron la vida los jóvenes Alexis Herrera Pino, Gabriel Echeverría de Jesús e ingeniero Gonzalo Rivas Cámara, sin embargo, quienes formamos parte de la Procuraduría General de Justicia del estado en ese tiempo fuimos sometidos a procedimientos penales acreditado nuestra inocencia en cuanto esos hechos y sus funestos resultados, no así, la corporación federal que no fue investigada y, de acuerdo a los elementos demostrados, tuvieron una participación de principio a fin en esos sucesos», dijo al fijar postura.
López Rosas recordó que presentó el 9 de abril de 2012 una denuncia de hechos ante la Procuraduría General de la República por «manipulación y sesgo» de las investigaciones por parte de Genaro García Luna, y el 10 de diciembre del 2012 interpuso una solicitud de juicio político en contra Raúl Placencia, «sin que ninguna de las acciones intentadas se haya dado trámite».
Informó que tras la reciente detención de García Luna, el 23 de diciembre del 2019 solicitó a la Fiscalía General de la República la reanudación de la denuncia de hechos que presentó en 2012, y la reapertura de las investigaciones, y el 8 de enero pasado, la dependencia respondió devolviendo la competencia a su delegación en Guerrero.
«No admito ni admitiré someterme a Tribunales de facto, una autoridad judicial debidamente constituida reclamó mi comparecencia judicialmente, a ello atendí y demostré que ninguna responsabilidad tuve en esos lamentables acontecimientos», dijo.
Advirtió que si cualquier organización pretende «aniquilarlo civil y políticamente’ debería hacerlo físicamente, al señalar que su indignación y convicción política será siempre más fuerte que su cobardía.
En ese sentido, señaló que continuará realizando actividad política en Guerrero bajo su aspiración a ser candidato a gobernador por Morena «con la convicción de que no he dañado ni dañaré a ningún semejante.
El ex procurador exhortó a organizaciones no gubernamentales a no alentar más odios ni confrontaciones entre guerrerenses, ni buscar culpables donde no los hay, al considerar que sobran evidencias de acciones arbitrarias de la federación.
Durante la conferencia de prensa, López Rosas presentó videos que ha mostrado en anteriores ocasiones, en los que se observa la presencia de policías federales durante el desalojo, y argumentó que fueron ellos quienes tuvieron «dominio» en ambos sentidos de la Autopista del Sol, dónde cayeron los cuerpos de los dos normalistas.