Ángel Galeana/Chilpancingo
Don Silvestre “N”, de 66 años de edad, sí murió por coronavirus a bordo del autobús en el que regresaba de Sinaloa a Guerrero el pasado domingo, por ello, los 32 adultos y 11 niños que viajaban en el camión permanecerán confinados en un albergue de la localidad de Zoquiapa, en el municipio de Tixtla.
La presidenta municipal, Erika Alcaraz Sosa, confirmó que la prueba que le practicaron al cadáver de don Silvestre dio positiva a coronavirus.
“La prueba salió positiva, nos dieron el resultado hoy (domingo) por la mañana. Las personas en confinamiento están bien, han tenido monitoreo por parte del Sector Salud del Estado y no presentan ningún síntoma, ninguna complicación de salud”, dijo la alcaldesa tras ser consultada por Réplica.
Don Silvestre murió el pasado domingo cuando regresaba a Guerrero después de trabajar 6 meses en los campos de Sinaloa. Viajaba junto a 32 adultos y 11 niños con destino a la comunidad de Zoquiapa, en el municipio de Tixtla, pero al pasar por el estado de Michoacán su estado de salud agravó y murió.
De acuerdo con la versión de la presidenta Alcaraz Sosa, obtenida por los mismos pasajeros, don Silvestre salió de Sinaloa con dolor de articulaciones, pero pidió continuar el viaje. En Michoacán registró tos intensa y posteriormente murió.
Aun con el cuerpo, los choferes del camión y los pasajeros decidieron viajar hasta Zoquiapa, pero fueron interceptados por la Guardia Nacional y la Policía municipal a solo minutos de llegar a su destino, en la “Estatua Ecuestre”, sobre la carretera federal Tixtla-Chilapa.
Las personas albergadas permanecerán en cuarentena y bajo vigilancia de las autoridades sanitarias.