Rafael Mendoza/Acapulco Gro.
Decenas de habitantes de la unidad habitacional El Pedregal de Cantaluna, que se encuentra en medio de los poblados de San Isidro y Pedregoso, bloquean la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo en exigencia de que autoridades atiendan los daños en más de 600 viviendas luego del sismo del pasado martes.
Desde las 10:30 de la mañana, los damnificados del sismo iniciaron el bloqueo justo enfrente de la unidad habitacional exigiendo la presencia de representantes del Infonavit y del Fovissste para que determinen qué es lo que sucederá con los condominios dañados que fueron construidos por la empresa Paquimé.
Y es que denunciaron que dicha empresa, que les vendió hace siete años los departamentos, han argumentado que las afectaciones en los departamentos no son graves y son habitables, sin embargo, los vecinos temen que las fisuras registradas tras el sismo hayan debilitado la estructura y en un nuevo temblor se derrumben.
Los inconformes mantienen bloqueada la carretera, y amagan con no retirarse hasta que acudan autoridades y el dueño de la empresa, Roberto Malvido Arriaga, pues lo acusan de haberlos defraudado con la venta de viviendas.
Tras el sismo, los vecinos de la unidad habitacional señalaron que se dañaron alrededor de 600 viviendas, las cuales no han sido revisadas por protección civil, por lo que no cuentan con un dictamen que les dé certeza que las casas son habitables.
Desde la noche del martes, decenas de personas duermen en la calle, afueras de sus casas, en donde instalaron sillones y colchones esperando que las autoridades determinen la condición de las viviendas.