Alina Navarrete Fernández/Copanatoyac, Gro.
Este domingo, por primera vez en la historia de Ocotequila, municipio de Copanatoyac, las mujeres votaron para elegir la Comisaría y fueron incluidas en las planillas que se postularon por el PRI, PRD, Morena y la independiente, encabezada por María Antonia Ramírez Marcelino.
La jornada electoral estaba programada para iniciar en punto de las 8 de la mañana, pero se retrasó casi media hora. Antonia Ramírez y el candidato del PRD, Álvaro de Dios Navarrete, fueron los únicos aspirantes a la Comisaría que se presentaron ante la Mesa de los Debates para el arranque de la votación.
Esta elección es por usos y costumbres, es decir, cada planilla llegó con un pliego de papel bond con su nombre: “Planilla Morena”, “Planilla PRD, “Planilla PRI”; incluso incluyeron los nombres de los candidatos a comisario. Sin embargo, debido a que las mujeres nunca habían participado en este proceso, Antonia desconocía que tenía que llegar con su propia hoja.
Desde la fila, varios hombres se quejaron por el retraso, en su lengua originaria náhuatl, mientras que Antonia les pidió paciencia y se apresuró a colocar su respectivo papel con su nombre “Planilla Antonia”. Una vez listas las cuatro hojas, la Mesa declaró el inicio oficial de las votaciones.
El secretario general del Ayuntamiento, Venustiano Hernández Rivera, llegó cuando ya habían comenzado las votaciones; más tarde, se presentaron una observadora del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), otros del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan y la Comisión de Derechos Humanos del Estado; así como personal de la Secretaría de Gobernación del Estado.
Durante las primeras horas de la votación, hubo una fluida participación, mujeres de la tercera edad, adultas y jóvenes, algunas con sus hijos en brazos, amamantándolos, se formaron junto a los hombres, varios con expresiones de contrariedad en sus rostros.
Manuela Iturbide Rodríguez fue la primera mujer nahua en votar por la Comisaría. En entrevista, la cual concedió en su lengua originaria y luego fue traducida al español, dijo que no recordaba su edad, pero estaba contenta por haber participado en las elecciones.
Su voto fue a favor de Morena porque ha sido un partido que “nos da apoyos”, en especial a las personas de la tercera edad. “Me siento bien”, expresó con una sonrisa que se notó, aunque tenía puesto un cubrebocas.
Antes del mediodía hubo tres momentos de tensión en la jornada electoral, el primero fue porque una joven con discapacidad llegó acompañada de su madre, quien dijo que su hija quería votar por la Planilla Antonia. De inmediato, varios hombres se acercaron a la Mesa acusando a la señora de influenciar el voto de su hija.
Entre alegatos, la Mesa decidió darle a la joven un lapicero y le pidieron que escogiera el pliego de papel donde quería que se sumara su voto. Con pena y decenas de ojos puestos sobre ella, la joven caminó hasta la hoja donde se leía “Planilla Antonia” y la señaló. Casi a regañadientes, los hombres aceptaron que la escrutadora pusiera la línea correspondiente.
Otro momento de tensión fue cuando una mujer se presentó a votar con una credencial que indicaba que residía en Copanatoyac y no en Ocotequila. En un principio, la Mesa se negó a permitirle votar, pero Venustiano Hernández intervino y analizó detenidamente la credencial; concluyó que la sección electoral correspondía a la comunidad.
Ante la mirada escéptica de los integrantes de la Mesa, Venustiano Hernández dijo que seguramente hubo un error del Instituto Nacional Electoral (INE) al expedir la credencial de la mujer e insistió en que debían permitirle votar, pero “todos tienen que estar de acuerdo”.
Ya sea por la presencia de medios de comunicación, los observadores del IEPC y derechos humanos, o por convicción propia, los hombres aceptaron que la mujer emitiera su voto. Después, una señora llegó con una copia de su INE en lugar de la original, argumentó que no la encontró y por eso llevaba prueba de que reside en la comunidad.
La Mesa discutió sobre si era válido o no que una persona ejerciera el voto con una copia de su INE y una vez más, cedió ante la presión de los observadores, así como de las promotoras del voto de las mujeres indígenas.
A la comunidad llegaron agentes de la Policía Estatal, luego de que Antonia Ramírez solicitó seguridad en la comunidad ante amenazas y hostigamiento para impedir que las mujeres acudieran a votar; sin embargo, los uniformados evitaron la zona en donde se llevó a cabo la elección y se dedicó a dar recorridos en los alrededores.
Hasta el mediodía, la votación continuaba con una participación fluida y se prevé que los resultados finales favorezcan nuevamente al candidato del PRI, Crescenciano López Escamilla; mientras que Antonia y su planilla conformada por cuatro hombres y cuatro mujeres logró posicionarse con más votos que el PRD.