Ángel Galeana/Chilpancingo
El exgobernador Héctor Astudillo Flores indicó que no está en condiciones de opinar a favor o en contra de la administración de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, toda vez que «vengo de ser gobernador», pero reiteró que el estado es muy difícil de gobernar por sus conflictos diarios.
Entrevistado al término de la reunión que sostuvieron priistas con la senadora Beatriz Paredes Rangel en Chilpancingo, acerca de las condiciones de seguridad del estado, Astudillo Flores dijo que se vería mal opinando, en cualquier sentido, de la administración que encabeza la gobernadora Evelyn Salgado, por lo que dijo, no emitirá posturas por ahora.
«Yo he declarado y reitero: yo no puedo estar en este momento en condiciones de andar haciendo declaraciones ni en contra ni a favor del gobierno de Guerrero. Yo vengo de ser gobernador, Guerrero es muy difícil, es muy complejo para quien lo gobierne, y quienes lo hemos gobernado sabemos perfectamente de la dificultad que es gobernar Guerrero, es un estado con conflictos diarios en los que hay que estar muy pendiente (…) yo me vería mal haciendo críticas o alabanzas al propio gobierno actual, prefiero mantenerme así, ya me tocará mi momento de volver a hablar», comentó.
Astudillo Flores dijo que Guerrero siempre es preocupante y que la seguridad nacional pasa por el estado.
Respecto a las críticas que han hecho los obispos Salvador Rangel y José de Jesús González Hernández a las condiciones de inseguridad en el estado en las últimas semanas, y al pacto entre Salvador Rangel y la Familia Michoacana para que la celebración de la Semana Santa se realizara sin contratiempos en Taxco,
Astudillo Flores se dijo respetuoso de las opiniones de la Iglesia, pero dijo que todos deben contribuir a la gobernabilidad de la entidad.
Por otro lado, sobre la gira de Beatriz Paredes Rangel a Guerrero, Astudillo Flores dijo que cumplirá con tener atención con todos, como en su caso lo hizo con la senadora Claudia Ruiz Massieu cuando visitó el estado semanas atrás, pero él respaldará a Paredes Rangel.
Sobre el proceso de elección que tendrá la oposición para definir la candidatura a la presidencia de la República, consideró que no sólo se debe considerar a los partidos políticos, y se pronunció nuevamente por una gran alianza para ganar la elección.
Señaló que se deben tomar como punto de partida para ganar los 30 millones de votos que obtuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque acotó que ha visto, en los lugares en los que se ha desplazado actualmente, como en el Estado de México, que hay «una enorme inconformidad de muchos que apoyaron, que le dieron su voto».
Por ello, indicó que deben pensar en obtener los votos de los partidos políticos, pero también de jóvenes o familias que no militan en partidos que ahora «más que nunca» son necesarios.
Astudillo Flores consideró que los partidos de oposición no están en desventaja ante los aspirantes de Morena que ya están haciendo campaña, como la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, o el canciller Marcelo Ebrard, quienes dijo, tienen la fuerza desde el partido político y no como perfiles personales.
«Hay en este país nuevas voces, nuevas expresiones, nuevas manifestaciones que hacen pensar que el escenario no es el mismo de hace 5 o 6 años; entonces, vamos a caminar precisamente en la búsqueda de que quien pueda encabezar esta gran alianza para dar la pelea», comentó.
Sobre el conflicto interno en el PRI, señaló que el presidente nacional, Alejandro Moreno, no genera unidad, por lo que esperarán a que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación resuelva el procedimiento de impugnación que tienen en desarrollo, y que haya un cambio en la dirigencia en el mes de agosto.