Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo
Tras los asesinatos registrados la mañana este lunes en Chilpancingo en contra del transporte público comenzó un nuevo paro de choferes en la capital y en rutas foráneas por temor a ser atacados.
Las paradas de la capital lucen prácticamente vacías. En rutas que circulan hacia el mercado central dejaron de circular, al igual en las paradas del centro de las rutas que circulan hacia la zona oriente.
De las rutas foráneas cerraron sus bases las urvans que circulan hacia Quechultenango y Petaquillas. En un comunicado, el Sitio Ocotito Asociación Civil (SOAC) informó a los usuarios que “por cuestiones de seguridad, el servicio de taxis del Ocotito a Chilpancingo y viceversa se llegará por el momento hasta Petaquillas debajo del puente elevado”.
El servicio agremiado a la Oatich también anunció que suspendió el servicio a fin de salvaguardar la integridad de choferes y pasajeros.
Tampoco se observa circulación de urvans en la zona sur de la ciudad.
El 8 julio del año pasado, una ola violenta dejó el saldo de cinco transportistas asesinados, dos de ellos calcinados, lo que provocó la suspensión del servicio en Chilpancingo, así como el incremento del pasaje.