Redacción
Habitantes de San Miguel Totolapana corrieron a un grupo de soldados que se habían instalado en una base de operaciones luego de que los militares fueron acusados de golpear a un menor de edad en la cabeza con la culata de un arma.
Los militares rompieron los protocolos y salieron por la madrugada. Dos camiones de transporte de personal llegaron a San Miguel Totolapan y salieron con el grupo de soldados a la 1 de la madrugada, luego de más de 8 horas de protestas de los pobladores que exigían la salida.
Por la tarde, los soldados fueron acusados de golpear a un menor de 13 años identificado como Juan Diego, durante una revisión en la comunidad de Loma de las Piedras. Se difundió una fotografía del menor con marcas de sangre en la ropa siendo atendido en el hospital.

La versión es que los soldados le cerraron el paso al menor que viajaba en su motocicleta de la comunidad de Loma de las Piedras hacia la cabecera municipal. Ahí lo revisaron y lo golpearon en la cabeza presuntamente con la culata de un arma.
Horas después, un grupo de pobladores llegó a la base que instaló el Ejército en una casa para exigir su salida. La protesta se extendió por más de 8 horas. Alrededor de las 11 de la noche, después de varias horas de manifestación, los pobladores intentaron irrumpir en la casa forzando el portón, pero los soldados lo impidieron poniéndose enfrente, colocando 2 vallas metálicas y golpeando con palos en las manos a quienes intentaron ingresar. Los manifestantes respondieron lanzando piedras.
En la protesta tuvo que intervenir el alcalde Arturo Julián Gómez y los regidores para mediar el conflicto y exigir de manera oficial la salida del Ejército. El cabildo sesionó de manera extraordinaria para emitir un documento en el que pedían que los soldados se fueran de San Miguel Totolapan.
En el transcurso de la manifestación, el alcalde sostuvo varias llamadas telefónicas con mandos del Ejército y con el subsecretario del gobierno estatal, Francisco Rodríguez Cisneros. Los mandos militares pedían que los soldados salieran a las 6 de la mañana de hoy por protocolos de traslados, pero los pobladores se negaron. El alcalde pedía a las autoridades que lo apoyaran para evitar mayores confrontaciones; incluso, amagó con tocar las campanas del pueblo para que la ciudadanía saliera a manifestarse.
Finalmente, a la media noche, acordaron que dos camiones ingresarían a San Miguel para sacar a los militares. Una hora después, a la 1 de la madrugada se retiró el convoy.
San Miguel Totolapan es un bastión del grupo delictivo de La Familia Michoacana. El 5 de octubre del 2022, fueron asesiandas 20 personas, entre ellas, el alcalde Conrado Mendoza Almeda.
Un día después, uno de los líderes del grupo criminal, José Alfredo Hurtado Olascoaga, alias El Fresa, apareció en un vídeo en el que, entre otras cosas, dijo que él vivía en San Miguel Totolapan y tenía su casa a una cuadra del Ayuntamiento.
Aseguró que el ataque en el que fueron asesinadas las 20 personas iba dirigido a él, pues se iba a reunir con el alcalde y otro grupo de personas con quienes habían conformado años atrás un «movimiento por la paz» en contra del extinto grupo delictivo de Los Tequileros».
El 27 de marzo, habitantes de la sierra entre San Miguel Totolapan y Heliodoro Castillo retuvieron a militares a quienes les exigieron ser intermediarios con autoridades federales para que se atendieran diversas demandas sociales y que no destruyeran sus plantíos de amapola.