Rafael Mendoza/Acapulco
El presidente de la asociación Unión de Bares de Acapulco de la Zona Conurbada, Álvaro Soriano Ríos, señaló que por el segundo cierre de actividades por el cambio a semáforo rojo, al menos 80 negocios, de 300 que integran su agrupación, ya no podrán reabrir.
En conferencia de prensa, el empresario explicó que por adeudos de rentas a los dueños de los locales desde el año pasado, este segundo cierre obligará a cerrar definitivamente varios negocios, por lo que buscan apoyos económicos.
«Se necesita mucho capital para poder reabrir para poder reinvertir, porque esto se necesita pagar muchos insumos, tener una base para poder pagar la plantilla de trabajadores, muchos ya no van a poder abrir, estoy hablando de unos 80 negocios que ya estaban en la lona de unos 300 agremiados, porque es imposible pagar rentas, traemos muchos gastos», resaltó.
Sin embargo, resaltó que en la asociación cumplirán con las medidas instruidas por las autoridades estatales para disminuir el número de contagios y de muertes por esta enfermedad, aunque pidió ser apoyados por los tres niveles de gobierno dado el gran número de personas desempleadas.
«Estábamos rolando el personal, para que de algún modo todos pudieran trabajar en los negocios, meseros, garroteros y otros, pero con esto que nuevamente cerramos cientos de empleos se pierden», finalizó.