Alberto Gómez/Chilpancingo
Trabajadores de la Secretaría de Estatal denunciaron que el sistema de Salud en Guerrero está colapsado y los empleados encargados de la atención a la pandemia exhaustos por el mal manejo de la crisis sanitaria que ha realizado el Gobierno del estado, que ha “explotado” a quienes laboran por contrato sin dotarlos de insumos de protección básicos.
Además, señalaron que la corrupción dentro de la dependencia ha propiciado que las plazas laborales se otorguen a la sección sindical que encabeza Beatriz Velez Núñez, quien, según los denunciantes, ha colocado a por lo menos 14 familiares, algunos como aviadores.
Por los manejos irregulares, señalaron que ya pusieron denuncias ante la Secretaría de la Función Pública y ante la Contraloría del Estado, sin embargo, esta última no ha respondido a los requerimientos. Advirtieron que el gobierno entrante tendrá que enfrentar “un montón de problemas”.
Los trabajadores Hilario Zúñiga Escamilla, Sibalaume Sánchez Luna, Catalina Salgado Navarro y Guillermo Ramírez Solís, denunciaron en conferencia de prensa realizada en Chilpancingo, que el mal manejo de la Secretaría de Salud que encabeza Carlos de la Peña Pintos ha propiciado una crisis de atención a pacientes Covid-19 y de otras patologías, así como la sobre carga de trabajo para los empleados que están en la primera línea de batalla.
El doctor Hilario Zúñiga, indicó que el llamado que hacen es al gobernador Héctor Astudillo Flores para que ordene un plan emergente para resolver la situación que padecen tanto pacientes como empelados, y que cambie al titular de la Secretaría de Salud para que, en los dos meses que quedan de su gobierno, atiendan adecuadamente la crisis sanitaria.
Dijo que el Gobierno del estado no se ha preocupado por dar insumos necesarios y de calidad a los trabajadores que atienden la pandemia, como cubrebocas, gorros, guantes, destacando que hay una situación de precariedad entre los empleados.
La Enfermera Catalina Salgado Navarro, denunció que las plazas de la Secretaría de Salud se están dando a personal administrativo y no de áreas médicas, como se requiere, por lo que “las plazas de enfermera de base las tienen abogados” que no tienen ninguna función dentro de la atención al coronavirus.
“Este es un reclamo que les hacemos desde aquí al Secretario de Salud. Nosotros sabemos que como médicos y enfermeras pues ya estamos exhaustos, estamos con sobre carga de trabajo, bajo presión por el servicio que requiere la ciudadanía y, por otro lado, además que estamos como personal de salud con acoso y sobre carga de trajo, se está despidiendo a la gente en plena pandemia”, indicó.
El médico Sibalaume Sánchez, denunció que los trabajadores están sometidos a estrés ya que no hay protocolos adecuados para enfrentar la pandemia, “y si los hay solo están en el papel, porque los primeros que no lo cumplen son los médicos”. Dijo que, a lo largo de la crisis, quienes han sido llamados por la Secretaría son empleados de contrato, y muchos de los de base están en su casa bajo el argumento de tener alto riesgo de contagio, lo cual, en muchos de los casos, dijo, es falso.
En el tema de administrativo, Guillermo Ramírez indicó que hay diversas irregulares con el manejo de las plazas. Ejemplificó que las plazas que quedan libres de quienes “obligan” a retirarse otorgándoles estímulos, son puestas a disposición del director de Recursos Humanos, tanto del estado como en regiones, y muchas de esos espacios terminan en el sindicato, a cargo de Beatriz Vélez Núñez.
En ese sentido, señaló que Vélez Núñez ha metido a trabajar a la Secretaría a por lo menos 14 familiares, de los cuales algunos son aviadores.
Guillermo Ramírez dijo que ya presentaron denuncias ante la Secretaría de la Función Pública y la Contraloría del Estado para que se investiguen las presuntas irregularidades; además, adelantó que entregarán carpetas a la próxima administración estatal buscando que tomen medidas.
En ese sentido, Catalina Salgado advirtió que el Gobierno entrante recibirá “un montón de problemas”, por el inflado número de plazas administrativas que no tienen techo presupuestal que a su vez propician menos contratación o mejoras laborales de médicos y enfermeras.