Redacción
Ciudad de México 15-Septiembre-2019
El juez primero de Distrito de procesos penales de Tamaulipas, Samuel Ventura Ramos, ordenó la liberación absoluta e inmediata de 24 policías de los municipios de Iguala, Cocula y Huitzuco, procesados por los delitos de delincuencia organizada y desaparición forzada, por el caso de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.
En conferencia de prensa realizada este domingo en la Ciudad de México, el subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno Federal, Alejandro Encinas, confirmó la liberación de los 24 inculpados, calificando la acción del juez como una afrenta al Gobierno federal.
Los inculpados fueron liberados por supuestos actos de tortura, pero con la utilización de criterios cuestionables, según Encinas, pues el juez ordenó que se practicara el protocolo de Estambul en un plazo de 10 días “siendo en materia imposible”, y negando una prórroga para la aplicación.
“Queremos señalarle al Poder Judicial de la Federación que la resolución es una afrenta a los trabajos de investigación que desarrolla el Gobierno Federal a través de la Comisión Presidencial para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa, ya que no observó la jurisprudencia del 21 de julio de 2019 que determina que la declaración obtenida por tortura obliga a reponer el procedimiento, investigando actos y elementos relacionados pero con el resto de las pruebas se debe determinar la materialidad del delito”
“Es decir, en la reposición del procedimiento, además de que subsisten las responsabilidades por los delitos cometidos, debe deslindarse la responsabilidad de los torturadores”, cuestionó.
En este sentido, Alejandro Encinas consideró que la resolución del juez sienta un grave precedente porqué otorgó beneficios a los imputados sin que hubiera una sentencia de tortura, como es la prueba de Estambul, y solo se basó en la “mera presunción”, privilegiando el derecho de los perpetradores sobre el derecho de la justicia que deben gozar las víctimas.
Los liberados
Los liberados son policías involucrados en la desaparición de los 43 normalistas y por tener nexos con el grupo delictivo de Los Guerreros Unidos.
Se trata de Verónica Bahena Cruz, Roberto Pedrote Nava, Jesús Parra Arroyo, Julio César Mateos Rosales, Juan de la Puente Medina, Nelson Román Rodríguez, Alberto Aceves Serrano, Wilber Barrios Mureña, Óscar Veleros Segura, Arturo Reyes Barrera, Joaquín Lagunas Franco, e Ignacio Aceves Rosales.
También Edgar Vieyra Pereyda, Alejandro Mota Román, Héctor Aguilar Ávalos, Leo Dan Fuentes Pineda, Oscar Augusto Pérez Carreto, Santiago Socorro Mazón Cedillo, Alejandro Lara García, Edgar Magdaleno Navarro Cruz, Miguel Ángel Ríos Sánchez, Osvaldo Ríos Sánchez, David Cruz Hernández y Abraham Julián Acevedo Popoca.
De todos ellos, ocho forman parte de un grupo identificado como Los Bélicos, y tres más continuarán recluidos por tener procesos pendientes.