Don Abel fabrica su última llanta de carreta tras 60 años de dedicarse al oficio.

Edgar de Jesús Espinoza

26-04-2019. Tecpan. Don Abel Serrano Ocampo  ha dedicado 60 años de su vida a la reparación y construcción de las ruedas de carreta en el municipio de Tecpan de Galeana, donde en algunos poblados este vehículo se ocupa como transporte jalado por bueyes para trabajar en cosechas de plátano, coco, y otros frutos que se producen en región.

A sus 88 años fabrica la última llanta de carreta, oficio que le ayudó a mantener a su familia. Su edad, y el peso de la madera con la que se construyen las llantas son pesadas para él, por lo que tiene que retirarse del trabajo que aprendió a hacer en su juventud, cuando no existían las carreteras de asfalto y concreto.

“En la carpintería, nomás que entregue esa rueda y es la última, estos palos los estoy sacando porque allá estaban, estoy limpiando para que puedan quedar ahí, si se los pueden vender a otro, y si no ahí que queden de recuerdo.

Sentado en su banco de madera, Don Abel narra cómo aprendió a elaborar las llantas de carreta que, en la época de los 70´s y 80´s, eran una herramienta de trabajo común,  pero que fueron remplazadas por las máquinas modernas como los tractores que ahora se utilizan en los campos de siembra.

El padre de don Abel se dedicaba al oficio. Al paso del tiempo envejeció y le tocó a él hacerse cargo de la carpintería, labor que ahora, después de 60 años, termina con un dejo de nostalgia.

“Mi papá trabajaba la carreta y yo me dediqué a los muebles, pero mi papá se hizo viejo y en ese tiempo había muchas carretas, porque aquí en Tecpan está registrada en el ayuntamiento, la carreta, como un vehículo de agricultura”

Don Abel recordó cómo uno de los primeros vehículos en su memoria llegó a Tecpan, cuando los caminos eran de terracería y la gente tardaba horas para llegar a Acapulco.

«Aquí vino a dar un señor con un carro pullman colorado, le decían pancholín, es el que llevaba a la gente a Acapulco, y pasaban todo el día en el camino; ahora no, en media hora están en Acapulco.

Él fue testigo del desarrollo en la región, de la utilización de carretas y caballos a los modernos automóviles, de las largas jornadas para llegar a Acapulco, a los 60 minutos que actualmente se tarda un automovilista promedio en recorrer los 100 kilómetros que lo separan de Tecpan.

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