Por: Redacción
12-06-19 Chilpancingo, Gro.- La diputada local por Morena, Mariana García Guillén, propuso una iniciativa de reforma al Código Penal del Estado, con la que plantea castigar a quienes contraten servicios sexuales a través de un intermediario -que obliga a otras personas, a través de la violencia, a ejercer la prostitución-, delito conocido como lenocinio.
La propuesta la presentó en la sesión de ayer y fue turnada a comisiones para su análisis y posterior dictaminación.
En su exposición de motivos la legisladora explicó que la prostitución es un tema que está en constante debate, generando diferentes posiciones y pocos consensos, “quizá como un reflejo de la sociedad conservadora que aún somos”.
«Si bien la sociedad mira con malos ojos a las y los que ejercen esta profesión (tanto hombres como mujeres) es la propia sociedad la que demanda estos servicios, aunque el tiempo haya avanzado parece que la situación de las prostitutas poco ha cambiado”.
García Guillén indicó que esa situación ha llevado a que cada estado de la república intente enfrentar la prostitución de muchas maneras, desde la prohibición hasta la regulación; además explicó que en México esa actividad está en una situación de “alegalidad”, toda vez que no está prohibida ni regulada.
Recordó que en el Código Penal del Estado reconoce el delito de lenocinio, pero no considera ninguna penalidad respecto de la persona que solicitan los servicios sexuales a través de un intermediario.
Ante esa situación propuso adicionar una fracción al artículo 175 del Código Penal del Estado, con la finalidad de que se considere una penalización contra todas las personas que soliciten servicios sexuales “a través de un intermediario que tenga subyugada para explotar sexualmente a otra persona”.
La diputada explicó que su iniciativa contempla un enfoque basado en experiencias exitosas de países como Suecia, Noruega e Islandia, en donde la prostitución no está penalizada, pero sí existen penas para aquellos que practiquen el consumo de servicios sexuales.
Aseguró que Guerrero es uno de los estados donde se comete con mayor frecuencia el delito de lenocinio, pues en el 2017 el estado ocupó el lugar 24 en el ranking nacional, mientras que en 2018 subió al puesto 14, presentando un aumento en la tasa del 267 por ciento.