Ángel Galeana
Chilpancingo, Gro. 25-Agosto-2019
El comandante de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en el valle del Ocotito, de Chilpancingo, David Barrientos Cabañas, señaló que para que su organización de autodefensa deponga las armas tienen que tener garantías de seguridad del Gobierno federal, de lo contrario, continuarán portándolas.
Al mediodía de este domingo, integrantes de la UPOEG y ciudadanos de Ocotito realizaron una caravana de seguridad en la comunidad previo al regreso a clases, ante la preocupación de padres de familia por las amenazas que han realizado grupos armados a los integrantes de la UPOEG, entre ellos, el Frente de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero.
La caravana recorrió las principales zonas del Ocotito, desde la entrada del Parque Industrial hasta la carretera federal Chilpancingo-Acapulco, y de ahí a la entrada de la comunidad de Cajeles.
En la caravana participaron al menos una veintena de coches y camionetas en las que colocaron cartulinas con mensajes de paz y no a la confrontación.
En entrevista, Barrientos Cabañas señaló que padres de familia han manifestado temor para llevar a sus hijos a la escuela este lunes, ante las amenazas del Frente de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero de hacer una irrupción armada en Ocotito para expulsar a la UPOEG.
“Recibimos muchas llamadas, por lo regular de padres de familia, con la preocupación de que hay amenazas de la policía de Tlacotepec, de gente externa a nuestro pueblo que quieren irrumpir otra vez, quieren volver a venir. No sé si todos tienen conocimiento que Salvador Alanís mandó gente de la Sierra, los mismos que entraron a Xaltianguis querían hacer lo mismo con Ocotito y la gente se está manifestando. La inquietud de padres de familia por lo regular es porque vienen las clases y quieren hacer algo”, dijo.
Respecto a las declaraciones que en días pasados hizo la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, sobre que el Gobierno federal ya platica con autodefensas para que depongan las armas y con ello contribuyan a disminuir los índices delictivos, el comandante de la UPOEG en Ocotito dijo que primero tienen que tener garantías de seguridad.
“Definitivamente nosotros estamos abiertos, nosotros sabemos que no vamos a estar armados toda la vida, pero para poder nosotros deponer las armas, para poder dejarlas, necesitamos garantías, necesitamos que nuestra gente se sienta confiada de que ya tenemos seguridad y que nos está brindando el Gobierno Federal, de lo contrario las armas se hicieron necesidad”, advirtió el comandante comunitario.
Recaló que la UPOEG está en disposición de coordinarse con la Guardia Nacional, o con las autoridades de Gobierno, pero para que “descansen” las armas, tiene que haber condiciones de seguridad.