Ángel Galeana
Chilpancingo, Gro. 1-Octubre-2019
Policías comunitarios del Movimiento Apaxtlense Adrián Castrejón implementarán un toque de queda a partir del próximo viernes en el municipio de Apaxtla, con lo que se impedirán actividades públicas a partir de las 11:30 de la noche. La Secretaría de Seguridad Pública del estado lo negó, pero las autoridades locales confirmaron lo dispuesto por el grupo de guardias civiles.
En redes sociales comenzó a circular un documento en el que se establece que, los policías comunitarios en coordinación con el ayuntamiento de Apaxtla determinaron el toque de queda ante el incremento de consumo de alcohol y drogas. En el escrito se describen las reglas que se implementarán a partir del próximo viernes en la noche.
Se establece que a partir de las 23:30 horas de los días lunes a domingo sonará la sirena de la patrulla o la ambulancia municipal y se activará un recorrido realizado en el pueblo, lo que significa el inicio del toque de queda para toda la población. A partir de la hora nadie estará en las calles.
De las 11:30 de la noche a las 4 de la mañana, solo una farmacia estará abierta para situaciones de emergencias. Si algún ciudadano necesita realizar actividades después de la hora señalada, tendrá que notificar a un número telefónico.
En caso de no acatar las reglas, se impondrán multas económicas hasta por 500 pesos, arrestos de 36 horas y clausura temporal o definitiva de un negocio.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado informó a través de redes sociales que el toque de queda es falso, sin embargo, las autoridades locales señalan que es verídico.
Consultado vía telefónica, el secretario General del Ayuntamiento, Javier Bermúdez Adán, confirmó que se llevará a cabo el toque de queda a partir del próximo viernes, pero dijo que es decretado por los policías comunitarios y el Ayuntamiento no participa.
Brevemente explicó que es el toque de queda que han implementado desde hace 6 años, y este viernes se activará nuevamente.
La primera vez que se implementó el toque de queda en el municipio de Apaxtla por los policías comunitarios fue en noviembre de 2013, cuando argumentaron motivos de seguridad para la población. Desde la implementación, las sirenas de emergencia se hacen sonar en la noche indicando que ningún ciudadano puede salir a las calles.