Carlos Navarrete Romero/ Chilpancingo, Gro.
Integrantes del Consejo de Autotransporte en Guerrero informaron que, derivado de la contingencia sanitaria provocada por el COVID-19 (coronavirus), los ingresos de los choferes de taxis y concesionarios en Chilpancingo han caído en un 50 por ciento.
Así lo informó el presidente de esa organización, José Erasto Figueroa, quien aseguró que las familias que dependen directamente del transporte público en la ciudad son un sector vulnerable por la contingencia.
Por esa razón consideró necesario que el gobierno del estado y el federal promuevan un subsidio que permita apoyar económicamente a taxistas y concesionarios, de quienes, aseguró, sus ingresos han caído en un 50 por ciento debido al aislamiento voluntario decretado por las autoridades para frenar el contagio masivo del coronavirus.
“Somos un grupo vulnerable, y creo que es importante que la ciudadanía sepa y tenga la confianza de que nos preocupamos por limpiar las unidades para protegernos y protegerlos. Pedimos al gobierno del estado que nos ayude con un subsidio y se nos tome en cuenta”.
Erasto Figueroa mencionó que ya se han hecho las gestiones correspondientes ante los diferentes concesionarios de la capital para que reduzcan a la mitad la renta de sus unidades, que actualmente es de 300 pesos por turno, lo que permitiría a los choferes tener un mejor margen de ganancias.
Mencionó que hasta este momento las cuotas a los usuarios no han incrementado y tampoco se conocen casos de taxistas que hayan abandonado sus unidades para buscar opciones de ingresos en otro sector.
Sin embargo advirtió que sostener esa situación será difícil si no hay apoyo de las autoridades.
“Veo difícil que podamos aguantar. Un grupo de compañeros ya pidió despensas y otras maneras para subsistir. Nosotros salimos a trabajar por necesidad, porque vivimos al día, por eso pedimos que nos ayuden con un subsidio del estado o federal”.
Finalmente mencionó que en Chilpancingo hay 808 taxis, en los que trabajan cerca de 7 mil choferes, y dijo que el 30 por ciento de los concesionarios ha accedido a disminuir la cuota para ayudarlos a llevar ingresos a sus hogares.