Carlos Navarrete Romero/ Chilpancingo, Gro.
Vendedores ambulantes expresaron su molestia por la determinación del alcalde, Antonio Gaspar Beltrán, de cerrar el zócalo de Chilpancingo, pues afirmaron que esa medida, emprendida para evitar la propagación del COVID-19 (coronavirus), afectará aún más sus ventas.
Ante esa situación exigieron a las autoridades municipales, estatales y federales que, de manera urgente, les entreguen apoyos económicos y despensas para enfrentar la contingencia sanitaria que ha arrastrado a una crisis económica en la capital.
Los inconformes ofrecieron una conferencia de prensa este sábado en la Alameda Granados Maldonado en la que denunciaron que no fueron notificados por ninguna autoridad del cierre de la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac, pese a que el gobierno municipal se había comprometido a informarles con anticipación de cualquier medida que se pudieran tomar ante el COVID-19.
Un vendedor de juguetes de nombre Víctor, criticó que el alcalde no hay considerado las consecuencias del cierre del zócalo, pues dijo que al no permitirles vender sus productos en ese lugar decenas de familias se quedarán sin ingresos.
“Estamos aquí porque queremos expresar nuestra inconformidad por la manera que nos cerraron el zócalo. El presidente dijo que si alguien hacía algo se nos informaría antes de, pero es mentira, eso no es cierto, nosotros nos enteramos ayer porque anoche estuvimos en el zócalo y vimos cuando empezaron a colocar las vallas”.
Recordó que la situación de los vendedores ambulantes ya era de por sí complicada, porque la recomendación de las autoridades a la población de no salir de sus casas y mantenerse en aislamiento voluntario para combatir el COVID-19, bajó considerablemente sus ventas.
Denunció también que el ayuntamiento no les ha ofrecido alternativas que les permitan seguir percibiendo ingresos, por lo que exigieron que de manera inmediata les otorguen apoyos económicos y despensas el tiempo que dure la contingencia.