Ángel Galeana/Chilpancingo
Luego de 6 años de estar en su búsqueda, los familiares de Crescenciano «N» acudieron por sus restos al Servicio Médico Forense de Chilpancingo, en donde tenía al menos cinco años en calidad de desconocido.
Crescenciano fue desaparecido el 12 de noviembre de 2014 en Chilapa, cuando regresaba de la cabecera municipal a la comunidad indígena de Macuixcatlán, de donde era originario. Su cuerpo fue encontrado en enero del 2015 en un paraje utilizado como fosas clandestinas junto a otros 9 cadáveres y 11 cabezas.
Tenía 28 años cuando lo raptaron y lo desaparecieron. Era chofer de una camioneta del servicio público de la ruta Chilapa-Macuixcatlán.
El día que fue privado de su libertad regresaba de Chilapa a su comunidad a bordo de la camioneta que manejaba para recoger pasaje, pero ya no llegó. A plena luz del día los delincuentes lo interceptaron y lo desaparecieron.
De acuerdo a una relatoría de hechos a la que Réplica tuvo acceso, su esposa lo esperó todo el día del 12 de noviembre pero no llegó. Al día siguiente salió a buscarlo sobre la carretera, al hospital y al centro de salud de Chilapa sin tener éxito. El 15 de noviembre presentó la denuncia y comenzó su peregrinar.
Este viernes, seis años después, los familiares acudieron al Semefo de Chilpancingo a recoger los restos, tras dar positivo a dos pruebas de ADN que se practicaron semanas atrás.
Entraron a las oficinas y luego de dos horas salieron con la autorización para llevarse los restos de Crescenciano, que para estás fechas tendría 34 años de edad.
Los restos se los entregaron en una bolsa blanca que se veía poco abultada. Los familiares llevaron un ataúd y ahí trasladaron a su ser querido a su comunidad de origen a bordo de una camioneta.
El presidente de Colectivo Siempre Vivos, José Díaz Navarro, quien acompañó a los familiares de Crescenciano, declaró afuera del Semefo que en 2014 había una pugna fuerte entre los grupos delictivos de Los Rojos y Los Ardillos, por lo que, desde su perspectiva, no hay claridad sobre quiénes pudieron ser los responsables de la desaparición.
Momentos después de que los familiares se llevaron los restos de Crescenciano, informó que el cuerpo fue localizado en el paraje de El Huizache, de la comunidad de Tepehuixco, en Chilapa.
Según información que en su momento reveló la Fiscalía General del Estado, en ese paraje fueron localizados los cuerpos de 10 personas y 11 cabezas en seis fosas clandestinas.
Díaz Navarro denunció que los casos de desaparición siguen ocurriendo en Chilapa, y responsabilizó al grupo delictivo de Los Ardillos de los hechos de violencia en ese municipio y en los alrededores, y a la falta de acción de las autoridades de seguridad y procuración de justicia.
Señaló que el reporte más reciente de una persona desaparecida es del 20 de septiembre de este año, lo que refleja que continúa una crisis humanitaria en Chilapa.