José Isaid León Rodríguez es licenciado de nutrición y ciencia de los alimentos con maestría en ciencias de la educación. Se ha desempeñado como asesor nutricional del equipo de tercera división profesional Los Avispones de Chilpancingo. Ha sido conferencista a nivel nacional e internacional en temas de nutrición en la infancia y adolescencia, y coordinador del consultorio de nutrición Equilibrato. Nutriólogo capacitador del personal de la Secretaría de Salud en Guerrero, y docente en la Universidad Autónoma de Guadalajara en el área de nutrición del deporte.
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El 14 de noviembre se celebra el día mundial de la lucha contra la diabetes, una enfermedad que ha cobrado muchas vidas a nivel mundial, y en nuestro país ocupa una de las primeras causas de muerte.
La diabetes mellitus es una enfermedad crónica degenerativa que se caracteriza por un aumento de los niveles de glucosa, esta hiperglucemia (niveles altos de glucosa en sangre) ocasiona múltiples complicaciones y puede mermar en gran manera la calidad de vida de las personas que la padecen.
Existen cuatro tipos principales de diabetes:
• Diabetes tipo 1. Suele aparecer con mayor frecuencia en la infancia o la juventud, aunque es posible que se manifieste más tardíamente. Aunque su origen todavía no está muy claro, se sospecha que existe una reacción autoinmune que provoca que las defensas del propio organismo ataquen a las células productoras de insulina del páncreas, lo que da lugar al déficit de esta sustancia.
• Diabetes tipo 2. Es el tipo más común de diabetes, pues abarca, según datos de la Fundación para la Diabetes, entre el 85% y el 90% del total de los casos.
Cuando se sufre diabetes tipo 2, el organismo puede producir insulina, pero no lo hace en la cantidad adecuada o no es capaz de responder a sus efectos, lo que provoca la acumulación de la glucosa en la sangre.
• Diabetes gestacional. Durante el embarazo puede ocurrir que los cambios hormonales propios de este estado originen un bloqueo de la función de la insulina. Cuando esto sucede, los niveles de glucosa se pueden incrementar en la sangre de una mujer embarazada. Suele presentarse en una etapa avanzada de la gestación y afecta a alrededor del 5% de las mujeres embarazadas. Aunque normalmente desaparece tras dar a la luz, constituye un factor de riesgo para desarrollar diabetes tipo 2 en el futuro, tanto para las madres como para sus hijos.
• Diabetes tipo LADA. La Fundación para la Diabetes advierte de que en los últimos años se está prestando atención a un tipo de paciente con diabetes tipo 2, pero que, al mismo tiempo, presenta los anticuerpos positivos característicos del tipo 1. Probablemente, este tipo de diabéticos acabe necesitando tratamiento con insulina.
Es importante mencionar que el diagnóstico de diabetes mellitus no implica un sinónimo de muerte, sin embargo, es importante controlar la enfermedad porque no es posible curarla, pero sí es posible tratarla y evitarla con algunos buenos hábitos de salud, que en específico recae mucho en la dieta que llevamos y el ejercicio que realizamos para poder prevenirla y tratar la enfermedad.
Es por ello que surge esta pregunta: ¿Cómo luchar contra la Diabetes mellitus? Una manera importante es informar a la población de una manera correcta, pero también es fundamental que esta información que se le da a la sociedad sea aplicable a nuestra vida diaria, y este tipo de escenarios deberían de estar presentes desde la familia nuclear (padres e hijos).
La educación nutricional y la generación de políticas públicas adecuadas, pueden ser una buena herramienta para generar un cambio significativo en la calidad de vida de las personas.
Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir la aparición de la diabetes tipo 2, la forma más común de la enfermedad. La prevención es especialmente importante si actualmente corres un mayor riesgo de diabetes tipo 2 debido al exceso de peso o la obesidad, niveles altos de colesterol o antecedentes familiares de diabetes, me gustaría mencionarte 5 puntos claves para poder luchar contra la diabetes Mellitus:
- Descansa las horas necesarias. (duerme de 7 a 8 horas).
- Mantén tu peso adecuado (El generar una cultura nutricional será clave para lograr este objetivo).
- Adopta un deporte o actividad física. (realiza una actividad repetida por más de 35 a 60 minutos cómo caminar o trotar o bailar de manera continua, 6 veces por semana).
- Mantén una dieta saludable (incluir de todos los grupos de alimentos, lo ideal es que un nutriólogo te organicé un plan de alimentación de acuerdo a tus necesidades y características).
- Mantener una buena hidratación (tomar de 2 litros a 3 litros de agua natural al día).
Recuerda que una de las mejores formas de cuidar tu salud es mejorando la calidad de tu alimentación, acude con tu nutriólogo y tu médico internista para mejorar tu calidad de vida ante esta terrible enfermedad.
Recuerda comer sanamente, come Equilibrato, hasta pronto.