Alberto Gómez/Chilpancingo
Integrantes de la coordinadora sectorial región centro de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG), llamaron al magisterio disidente a la desobediencia civil contra la declaración patrimonial que el estado «pretende imponer».
Argumentaron que dicha medida intenta desaparecer los ya «minados» derechos laborales de los trabajadores de la educación y que ahora pretenden despojarlos de su estatus de contratación regulado por el artículo 123 apartado B y trasladarlo a servidor público.
«La implicación grave es que al tratarnos como servidores públicos, el Estado busca desconocer nuestra situación de asalariados, por ende nuestro derecho a la sindicalización y a la defensa colectiva de las condiciones generales de trabajo», señalaron.
Aseguraron que la declaración patrimonial y de intereses representa no un simple trámite de rendición de cuentas, sino un cambio de régimen de contratación, debido a que en el momento que el trabajador rinda este trámite de facto otorga esta facultad al Estado.
Los maestros disidentes acusaron a la dirección de contraloría de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) de hostigamiento laboral en contra del magisterio guerrerense, pues mediante los supervisores y directores de las escuelas de Guerrero los amenazan con sanciones, incluidas el despido.
Por ello, los cetegistas llamaron a sus compañeros a la resistencia, desobediencia, a la organización, a la lucha política y jurídica para defender sus empleos.
Por último, anunciaron una nueva jornada de lucha este jueves en la capital en defensa de la estabilidad laboral y estatus como trabajadores al servicio del Estado, «por ello señalamos que nuevamente no pasará el intento de violentar nuestros derechos».