Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
El coordinador de la Unidad Legal y de Análisis de la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU), Alan García Campos, dijo que históricamente Guerrero ha sido epicentro de desaparición forzada y los avances en materia de desapariciones en el país “no han sido ni suficientes ni eficaces”.
Alan García participó en la inauguración de la V Exposición Fotográfica de Personas Desaparecidas en Guerrero que organizó el Colectivo Memoria, Verdad y Justicia Acapulco en el Zócalo del puerto.
En su intervención, el comisionado de la ONU expresó que “si una sociedad sabe lo que es la desaparición de personas es la sociedad guerrerense”, debido a los casos que se acumulan en la entidad desde la década de 1960, incluyendo la desaparición forzada.
Reconoció que a nivel nacional “es verdad que hay avances, pero también es verdad que esos avances no han sido ni suficientes ni eficaces” para encontrar a las víctimas e impartir justicias para las familias afectadas por este fenómeno.
Ante este panorama, señaló que la ONU está comprometida “en garantizar y promover” que el Estado Mexicano atienda recomendaciones de los órganos internacionales en materia de desapariciones y desapariciones forzadas.
En declaraciones, puntualizó que “Guerrero, históricamente, ha sido el epicentro de las desapariciones forzadas en México desde hace más de 50 años, esto no es solamente una herencia del pasado”.
Lo anterior debido a que durante la inauguración de la exposición, familiares expusieron casos de personas que desaparecieron recientemente, incluso hace 10 días.
Refirió que en México son las familias las que asumen las tareas de búsqueda de personas desaparecidas, pero terminan siendo agredidas e incluso asesinadas como la activista de Sinaloa, Rosario Lilián Rodríguez.
Destacó que Rosario Lilián “sustituyó al Estado en una responsabilidad” y fue asesinada de manera cruel e inhumana, precisamente el 30 de agosto, Día Internacional del Detenido-Desaparecido.
Finalmente, llamó a las autoridades a reconocer el problema de desaparición, refrendar su voluntad política para atender los casos “con acciones”, que otorguen recursos suficientes, construyan capacidades necesarias y “acompañen a las víctimas con empatía, con solidaridad pero sobre todo cumpliendo lo que son sus responsabilidades nacionales e internacionales”.
Por su parte, los activistas y familiares de víctimas exigieron acciones contundentes para encontrar a las personas desaparecidas; señalaron que con la exposición buscan recordar “que los buscamos hasta encontrarlos” y continuarán en resistencia debido a que se consideran “producto de la omisión” de las autoridades para garantizar su seguridad.