Ángel Galeana/Chilpancingo.
El gobernador Héctor Astudillo Flores aseguró que los comisarios que fueron desalojados este jueves de la Autopista del Sol llegaron a Chilpancingo para provocar al Gobierno estatal, y sugirió que fueron enviados por el grupo delictivo “Los Ardillos”, quienes tienen presencia en los municipios de los que son originarios los manifestantes.
Entrevistado en el municipio de Huitzuco, el gobernador fue cuestionado sobre el desalojo realizado la tarde de ayer por la Policía del estado en la Autopista del Sol a comisarios de los municipios de José Joaquín de Herrera, Quechultenango, Acatepec y Chilapa , quienes arribaron a Chilpancingo exigiendo la terminación de dos tramos carreteros, argumentando que están abandonados por las constructoras encargadas de realzarlos.
Astudillo Flores defendió que las obras que los comisarios demandan se están haciendo, y que su presencia en la ciudad fue para provocar a las autoridades. Señaló que por su origen, no es necesario “ser tan sabios” por quiénes fueron enviados.
“Los protestantes fueron enviados a bloquear como una autentica provocación. Nada más hay que ver de dónde vienen, no hay que ser tan sabios, a las personas que detuvieron de dónde son, son de Tlanicuilulco, entonces, no hay que echarle mucho seso para entender de qué se trató, fue una actitud de presión y de provocación y el Gobierno del estado no reacciona de esa manera, lamento lo sucedido pero el Gobierno no está para presiones ni chantajes de este tipo”, comentó.
Tlanicuilulco es una comunidad de Quechultenango de la que son originarios los líderes del grupo delictivo Los Ardillos, quienes tienen presencia en los municipios que representan los comisarios que exigen la construcción de las carreteras.
Astudillo Flores consideró que a los manifestantes les faltó disposición para hacer un planteamiento sobre un tema que, reiteró, se está atendiendo.
“Lo que sucedió ahí es que fueron enviados para causar un problema, y no hay que ser tan sabios, ustedes saben de dónde vienen”, insistió.