Alina Navarrete Fernández/Chilpancingo, Gro.
Casi cuatro años después de haber sido víctima de agresión sexual a manos de una agente de la Policía Municipal de Tlapa, la feminista Yndira Sandoval Sánchez recibió una disculpa pública de parte del alcalde Dionicio Merced Pichardo García, ante la Cámara de Diputados, durante una sesión virtual.
El 16 de septiembre del 2017, Yndira Sandoval fue detenida de manera arbitraria por policías municipales afuera de un hospital de Tlapa, acusada de alterar el orden público; durante los hechos, se cometió una serie de violaciones a sus derechos humanos, entre ellas la violencia sexual, que fueron denunciadas ante el Ministerio Público y la Fiscalía General del Estado (FGE).
La denuncia causó polémica y varios ataques mediáticos en contra de la activista, por lo que el caso se presentó ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), que en 2019 emitió la recomendación 63/2019 en la que se acreditó la Tortura Sexual de la que Yndira Sandoval fue víctima –con base a investigaciones y la aplicación del Protocolo de Estambul–, por lo que se ordenó a las autoridades de Guerrero reparar el daño.
Sin embargo, fue hasta hoy por la mañana que la recomendación de la CNDH se cumplió porque Dionicio Pichardo ofreció a Yndira Sandoval “una disculpa pública por las agresiones que sufrió (…), así como por todas las implicaciones que este acto victimizante le ha implicado en su vida personal, familiar, profesional, económica, social y política, así como toda vulneración a sus derechos humanos”.
No obstante, el alcalde morenista resaltó que los hechos ocurrieron antes de que él llegara al Ayuntamiento de Tlapa, como presidente municipal, pero asumió su “responsabilidad institucional” y se comprometió a trabajar en coordinación con la FGE, para reparar totalmente el daño e incluir a Yndira Sandoval en el Mecanismo Estatal de Protección de Defensores de Derechos Humanos.
Así como a construir una escuela para defensores de Derechos Humanos en Tlapa, bajo el nombre “Seguridad, justicia y paz”; presentar e impulsar la aprobación de la iniciativa legislativa que reforma y adiciona al Código Penal de Guerrero, para que toda violencia sexual contra las mujeres cometida por agentes del Estado, “sean tipificadas, reconocidas, investigadas y sancionadas como tortura sexual”.
En su intervención, Yndira Sandoval habló en nombre de todas las víctimas de la violencia feminicida en México y resaltó a Basilia Castañeda Maciel, a quien se refirió como “una mujer víctima por un agente del Estado, senador que quiso ser gobernador”, en alusión a Félix Salgado Macedonio, acusado de violación sexual.
La activista dijo que ha sido criminalizada “por ser mujer y por ser feminista”, pues si un hombre hubiera estado en las mismas circunstancias bajo las cuales se dio su detención y agresión sexual, no habría sido un tema de discusión.
“Este acto de disculpa pública no repara el daño que me hacen, pero que significa y simboliza mucho el hecho de que el día de hoy en voz alta, se diga que nunca mentí, que hoy se diga en voz alta siempre tuve la razón (…), desde aquí les expresó a quiénes me escuchan que nunca callen, que nunca se sientan culpables, que nunca tendrán ustedes la culpa y que nunca claudiquen”, expresó.
Finalmente, al Estado, que tiene una “deuda histórica” con las mujeres, le exigió que cumpla, “de manera cualitativa, cuantitativa, sustantiva, la recomendación 1325 emitida por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”, la cual que exige a las partes en conflicto que respeten los derechos de las mujeres y apoyen su participación en las negociaciones de paz.