Ángel Galeana/Chilpancingo
El gobernador Héctor Astudillo Flores rindió un homenaje a quien se refirió como “su querido hermano”, el exgobernador René Juárez Cisneros, quien el pasado lunes murió a consecuencia del coronavirus, enfermedad que padeció durante tres meses.
El homenaje se realizó en la explanada de la sede del Poder Ejecutivo en Chilpancingo, ya con la urna de las cenizas del exgobernador, quien ayer recibió un homenaje de cuerpo presente en la Cámara de Diputados. En el evento estuvieron la esposa de René Juárez, sus hijos y hermanos. Asistieron solo dos exgobernadores, Rubén Figueroa Alcocer y Zeferino Torreblanca Galindo.
El evento fu restringido por la pandemia. “El evento requería ser más concurrido, nos vimos obligados a hacerlo reducido para cuidado de los asistentes en este momento de la pandemia”, dijo el gobernador durante su discurso.
Astudillo Flores fue el único orador en el homenaje, en el que destacó tres cualidades de René Juárez en su vida, dignidad, humildad y lealtad.
“René luchó toda su vida, fue un luchador que tuvo grandes desafíos, luchó en esta última batalla más de 3 meses. A la pandemia le costó tiempo vencerlo, nos quedamos con su legado de soñar y lograr hacer realidad nuestros anhelos y sueños, no importa el origen ni la condición económica, cuando se quiere, se puede. Con René Juárez Cisneros nos volveremos a encontrar, como nos encontramos en el deporte, como nos encontramos en la política, y especialmente, en la amistad”, dijo Astudillo Flores.
El gobernador destacó que René Juárez fue un hombre municipalista ya que impulsó la creación de los municipios de José Joaquín de Herrera, Iliatenco, Marquelia, Juchitán y Cochoapa, y lo reconoció como un hombre que sabía escuchar y callar, pero expresarse cuando se pedía su opinión.
Astudillo Flores recordó diversos pasajes en su vida política y personal en los que estuvieron juntos, uno de ellos, cuando René Juárez le dijo que quería ser gobernador y le pidió que fuera su coordinador de campaña y, posteriormente, le dijo, “tú serás gobernador”; en ese sentido, señaló que cuando ganó la elección en 2015, el más emocionado fue René Juárez, quien vio el resultado como una reivindicación.
Señaló que el presidente Andrés Manuel López Obrador le dijo: “el diputado René Juárez siempre habla bien de ti, eso quiere decir que René es un buen amigo tuyo”. Al ser la referencia, el gobernador agradeció públicamente a López Obrador sus palabras de condolencias.
Astudillo Flores recordó la carrera legislativa de René Juárez, quien fue dos veces diputado federal y una vez senador, también su paso por la secretaría de planeación del Gobierno del estado y por el gobierno de Acapulco.
Tras el discurso del gobernador, se rindieron guardias de honor en una urna que contenía las cenizas de René Juárez, en las que participaron el gobernador, su esposa, familiares y dirigentes de partidos políticos.
Al homenaje asistieron la esposa de René Juárez, Virginia Campos Perea, y sus hijos René y Ana María Juárez Albarrán, María René, Carmen Andrea y Carlos Emiliano Juárez Acevedo, Mariana y Ricardo Juárez Campos, Atenas Juárez Olaguibel y sus hermanos Bernardina y Ricardo Juárez.
De los exgobernadores estuvieron presentes Rubén Figueroa Alcocer y Zeferino Torreblanca Galindo, y se disculparon por no asistir Ángel Aguirre Rivero y Rogelio Ortega Martínez.
También asistieron los representantes del Poder Legislativo y Judicial, Eunice Monzón García y Alberto López Celis, respectivamente. Además, se vio a los dirigentes estatales del PRI y del PRD, Héctor Apreza Patrón y Alberto Catalán Bastida.