Carlos Navarrete Romero/ Chilpancingo, Gro.
Como se anunció ayer, este martes fue presentada ante el pleno del Congreso local la “Ley Malena”, una serie de reformas a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y al Código Penal del Estado, con las que se plantea reconocer las agresiones con ácido o sustancias corrosivas como un tipo de violencia de género y que se tipifiquen como tentativa de feminicidio.
La presentación de la iniciativa estuvo a cargo de la diputada de Morena, Citlalli Calixto Jiménez, quien en su exposición de motivos explicó que este tipo de agresiones, conocidas como “violencia ácida”, son la forma más extrema de violencia antes del feminicidio.
Señaló que al año se producen al menos mil 500 agresiones de este tipo alrededor del mundo, siendo mujeres más del 80 % de las víctimas registradas.
Calixto Jimánez mencionó el caso de la saxofonista oaxaqueña, María Elena Ríos Ortíz, quien es sobreviviente a un ataque con ácido y por quien la iniciativa lleva el nombre de “Ley Malena”.
“Su caso no es el único. Decenas de mujeres alrededor de nuestro país han vivido y viven este tipo de violencia de género extremo e inhumano. En Guerrero no se alcanza a cuantificar públicamente el número de mujeres que han sido violentadas con ácido. El temor a la indiferencia, al maltrato, a la revictimización, a las represalias, a la impunidad, son factores que inhiben la denuncia y que nos imposibilita dimensionar la magnitud de este problema”.
La morenista explicó que con la “Ley Malena” se pretende reconocer la “violencia ácida” como un tipo de violencia de género, que este tipo de agresiones se castiguen hasta con 21 años de cárcel y que se tipifiquen como tentativa de feminicidio cuando las lesiones provoquen resección parcial o total en las mamas, alteración en el aparato genital, en las funciones de reproducción sexual o atente contra el ejercicio de la autonomía sexual, cause alguna deformidad o daño físico permanente en algún órgano, provoque daños en extremidades, entorpezca, debilite u ocasione la pérdida parcial o total del oído, vista, habla o incapacidad permanente para trabajar.
“La iniciativa en comento busca dotar de herramientas jurídicas al Estado para que nunca más exista impunidad en este tipo de casos. En ese sentido, compañeras y compañeros diputados, les pido nos acompañen en esta ruta, les pido que escuchemos las historias de vida, que analicemos la propuesta4
con perspectiva de género y que hagamos equipo para emitir una legislación a la altura de lo que la sociedad nos demanda”.
La propuesta fue turnada a las Comisiones Unidas Para la Igualdad de Género y de Justicia para su análisis y posterior dictaminación.